La reacción de la comunidad internacional no se hizo esperar.
Varios gobiernos han condenado el golpe de Estado, entre ellos el
de Venezuela, donde el presidente Hugo Chávez afirmó que "pueblos y
gobiernos del ALBA están en batalla".
Chávez, llamó hoy al Ejército de Honduras a la reflexión después
que efectivos de las fuerzas armadas secuestraron en horas de la
madrugada al presidente Manuel Zelaya.
En declaraciones al canal Telesur, el mandatario expresó que
estamos en presencia de un golpe de Estado troglodita y señaló que
ojalá no vayan a arremeter con esos fusiles contra el pueblo como
ocurrió infinidad de veces en este continente.
Ahí están, soldados, hombres del pueblo, mandados por oficiales
que son también del pueblo, y vienen del pueblo, pero pierden la
noción de que vienen del pueblo, subrayó.
Vamos a hacer un frente de lucha centroamericano que permita
restituir al presidente José Manuel Zelaya, anunció el presidente de
Nicaragua Daniel Ortega.
Mientras el dignatario ecuatoriano, Rafael Correa, formuló un
llamamiento al pueblo hondureño a levantarse contra estos poderes
fácticos, a apelar a la conciencia de los soldados, que son pueblo
uniformado, que no tienen que obedecer órdenes ilegítimas,
criminales, y a restituir al Gobierno legítimo de Honduras, del
presidente José Manuel Zelaya.
En tono enérgico indicó: "Aquí estamos férreamente unidos en el
ALBA para defender la dignidad, la soberanía y los intereses de
nuestros pueblos".
También Evo Morales se manifestó desde Bolivia contra el golpe de
Estado en la nación centroamericana. "Es una aventura que atenta
contra la democracia y la voluntad popular", e instó al pueblo
hondureño a defender a su presidente y a los bolivianos a expresar
su rechazo al secuestro.
El dignatario guatemalteco Álvaro Colom reiteró hoy la postura de
su gobierno de reconocer como único mandatario de Honduras a Manuel
Zelaya.
"El gobierno de Guatemala se reserva el derecho de tomar las
medidas que considere conveniente con el fin de lograr que se
restablezca el orden democrático constitucional de la República de
Honduras", sentencia una declaración de ese gobierno.
"Acciones militares de ese tipo (golpe de Estado) configuran un
atentado a la democracia y no concuerdan con el desarrollo político
de la región", apunta una comunicación oficial, divulgada por el
Ministerio brasileño de Relaciones Exteriores.
El gobierno brasileño se solidariza con el pueblo hondureño y
reclama que el presidente Zelaya sea inmediata e incondicionalmente
repuesto en sus funciones, asevera.
También la cancillería uruguaya advirtió que no reconocerá a "un
eventual gobierno que pudiera surgir de una situación de ruptura de
la legítima institucionalidad democrática" en Honduras.
En ese mismo sentido se pronunció el ejecutivo de Panamá, bajo la
presidencia de Martín Torrijos, que condenó la acción golpista
ocurrida en Honduras.
En tanto el partido de gobierno del El Salvador, el FMLN, apuntó
que los sectores tradicionales de poder en Honduras "entienden que
la democracia termina cuando el pueblo se quiere pronunciar y han
llegado al extremo de movilizar a militares antipatriotas, como lo
ha señalado el presidente Zelaya".
Desde la República Dominicana, su presidente Leonel Fernández,
dijo que la asonada representa "un retroceso porque con él se viola
la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos
(OEA)", acorde con una nota difundida a través de la página web de
la presidencia que no especifica dónde fueron hechas las
declaraciones.
Como un retorno a la barbarie consideró la mandataria argentina
Cristina Fernández el golpe de estado contra el gobierno hondureño
de Manuel Zelaya, y exigió garantías para su vida e integridad
física.
La Organización de Estados Americanos (OEA), en una reunión de
emergencia emitió una resolución de rechazo ante la asonada.
Igualmente la Unión Europea rechazó unánimemente el golpe militar
en Honduras contra el presidente Manuel Zelaya y pidió la inmediata
restitución del orden constitucional, según anunció en Corfú,
Grecia, el canciller español, Miguel Ángel Moratinos.
Francia también repudió "con la mayor firmeza" el golpe de Estado
en Honduras y exigió el restablecimiento inmediato del orden
constitucional y la democracia.
Hasta la propia secretaria de Estado del gobierno estadounidense,
Hillary Clinton dijo que su país solo reconoce como presidente de
Honduras a José Manuel Zelaya.
La Asamblea General de Naciones Unidas celebrará hoy una sesión
plenaria especial para debatir el golpe de estado en Honduras y el
secuestro de su presidente constitucional, Manuel Zelaya.
Igualmente, el presidente del Buró de Coordinación del Movimiento
de Países No Alineados (MNOAL), embajador de Cuba en la ONU,
Abelardo Moreno, repudió el golpe de Estado en Honduras. (SE)