.—
El presidente Barack Obama confirmó hoy un nuevo plan de su
administración dirigido a crear al menos medio millón de empleos,
con la meta de paliar el impacto de la recesión estadounidense.
Según la Casa Blanca, el programa de estímulo empresarial se
pondrá en práctica durante los próximos tres meses por medio de la
implementación de 10 grandes proyectos aprobados por el Congreso.
Las iniciativas del gobierno demócrata incluyen la instalación de
200 sistemas hidráulicos en zonas rurales, la modernización de
aeropuertos, y la presentación de 125 mil empleos para jóvenes
durante el venidero verano.
A inicios de este año la administración estadounidense prometió
un fondo de 135 mil millones de dólares para acelerar varios
proyectos laborales, y hasta la fecha sólo 44 mil millones fueron
oficialmente activados.
De acuerdo con cifras del Departamento del Trabajo difundidas
este viernes, la economía norteamericana perdió 345 mil puestos
laborales en el mes de mayo, aunque la previsión de analistas era
peor: 650 mil.
El nivel nacional de desempleo alcanza actualmente 9,4 por
ciento, su más alta tasa desde 1983, mientras especialistas auguran
que el dato sobrepasará en breve un 10 por ciento.
En total, en la industria estadounidense se volatilizaron 5,7
millones de empleos desde diciembre de 2007, y políticos alertan que
la reciente bancarrota del consorcio General Motors engrosará aún
más el inventario de obreros parados.