Una tecnología agroecológica para estimular los microorganismos
existentes en los suelos, responsables de la nutrición de las
plantas, fue desarrollada por el ingeniero Adrián García Bruzón.
El autor pertenece a la Cooperativa de Crédito y Servicios
Vicente Suárez, de San Antonio de los Baños, y obtuvo premio
Relevante en el Forum de Ciencia y Técnica de la Asociación Nacional
de Agricultores Pequeños (ANAP) en La Habana.
García explicó a la AIN que logró esa estimulación de los
microorganismos autóctonos de la tierra con biomasas activas, para
lo cual estudió los suelos y las necesidades en ellos de los
microorganismos que establecen la simbiosis con las plantas para
nutrirlas.
Desarrolló con ese objetivo un grupo de concentrados de
nutrientes hasta lograr, entre 1994 y 1995, las primeras biomasas
activas, y de este modo posibilita ahorrar en importaciones, al
utilizar los productos químicos como alternativa, sólo en cantidades
mínimas y sin contaminar los suelos y el medio ambiente.
El coautor, es el productor Anselmo Díaz quien planteó a la AIN
que aplica la tecnología en papa, yuca, demás viandas y flores, o
sea en todos los cultivos, y que, sin usar ningún agroquímico
directamente, acabó con los ácaros y nemátodos que atacaban las
flores y le hicieron perder en un año 400 mil bulbos de gladiolos.
En la papa, a los dos días de introducirla en el sustrato que
tenían los microorganismos, la sembró porque ya tenía raíces, y de
la cantidad que guardaron en el frigorífico ni una se perdió, por
eso considera que la tecnología agroecológica debe estar en manos de
todos los productores.