Las lluvias llegaron como una bendición al norteño departamento
guatemalteco de Petén, donde hoy están declarados extinguidos 46 de
los 74 incendios forestales detectados.
Hasta el momento los fuegos destruyeron cinco mil 396 hectáreas
de varios tipos de bosques protegidos en ese territorio, limítrofe
al este con Belice y al oeste con México.
Aunque los expertos sólo achacan a las precipitaciones pluviales
el sofocamiento de 16 de los incendios, lo cierto es que estas
fueron bien recibidas por los pobladores de ese departamento, de 35
mil 854 kilómetros cuadrados y más de 366 mil habitantes.
El gobernador de Petén, Rudel Álvarez, informó que el 60 por
ciento de los fuegos fueron provocados en áreas de la Biosfera Maya
por personas presuntamente involucradas en el crimen organizado y el
narcotráfico.
También mencionó como causantes a terratenientes afectados por el
trabajo que se viene realizando en recuperar la gobernabilidad en
esa zona.
Un directivo del sitio arqueológico Parque Tikal, Fredy Soza,
indicó que para evitar que las llamas afecten las áreas verdes se
realizan patrullajes cerca del lugar conocido como El Zotz, donde se
sabe que sujetos no identificados están incendiando los bosques.