Diosney Pez, el hombre que hizo historia hace casi dos años con cinco goles en un partido del Nacional, volvió a congelar su nombre en la memoria de la afición al anotar los dos tantos con los que Cienfuegos batió a Villa Clara a domicilio en el partido de ida de la final del campeonato cubano de fútbol.

Un momento del partido de ayer.

Los sureños, actuales monarcas, se convirtieron en los verdugos de los naranjas en esta temporada al conseguir ayer con un Luis Pérez Lozano a reventar, su tercera victoria sin revés frente a los 10 veces monarcas.

En el campeonato 2007-08 en semifinales, Villa Clara ganó de visitante 1-0 y luego, en Zulueta, Cienfuegos le devolvió la píldora 2-1 en su camino hacia la tercera corona, mismo escenario en el que pretende festejar su cuarto cetro el próximo domingo, pero el anfitrión intentará una "misión imposible".

Pez, muy oportuno, logró su par de dianas a los minutos 12 y 55 con súbitas arrancadas y excelente puntería de cara a la puerta defendida por el internacional Odelín Molina, que ha anunciado su despedida tras más de una década en la selección nacional.

Nuestro colega en la Perla del Sur, Armando Sáez, tomó declaraciones a ambos técnicos. "Resultó como se esperaba: más agresividad que lucidez en la cancha y mucha presión. Al principio VCL perdió oportunidades claras. A una distracción nuestra, una falta a casi 30 metros, nuestros jugadores se privaron y CFG aprovechó. Pero nada está decidido todavía" (Julio César Álvarez).

"Estamos jugando fútbol. Enfrentamos a un gran equipo, pero fue determinante el aliento del público. El campo de Zulueta nos favorece" (Robin González).

Esta es la segunda final que disputan ambos cuadros. La primera fue en 1996 y favoreció a VCL. Por el bronce Camagüey derrotó en casa a Santiago de Cuba 1-0.