Wiliam Martínez, director del Circo Espectro, perteneciente al Consejo de las Artes Escénicas, explicó que defiende la iniciativa de crear el Circo del Sur, como una alternativa artística para los pueblos más pobres.

La experiencia del trabajo en comunidades a las que nunca antes llegó un artista, pudiera extenderse a otras naciones integradas a la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) en aras del mejoramiento humano, desarrollo espiritual e intercambio de culturas, agregó.

Luego de su experiencia durante cuatro meses en la Misión Cultura Corazón Adentro, en la República Bolivariana de Venezuela, Martínez afirmó a la AIN que la labor creativa realizada en las zonas más apartadas de los Cerros de Caracas permitió el intercambio y la solidaridad humana.

El artista, con más de 15 años de experiencia en el arte circense, comentó de la diferencia de esa modalidad escénica entre Cuba y la nación suramericana, donde el Circo no tiene escenario propio, sino se realizan funciones en semáforos, avenidas populosas e improvisadas tarimas.

A cualquier lugar que llegábamos en los Cerros éramos bien recibidos, los niños involucraban también a la familia, la experiencia es inolvidable, emotiva, puedo asegurar que crecimos mucho más como personas, destacó Martínez, quien interpreta un personaje de Payaso.