Proclamada
por tercera ocasión la Mejor Atleta femenina del mundo, la
pertiguista rusa Elena Isinbayeva impuso su sello personal a una
temporada en la que Jamaica y Brasil rindieron también actuaciones
olímpicas notables.
La bicampeona de las citas estivales, que había merecido ya el
principal galardón de la Asociación Internacional de Federaciones de
Atletismo en el 2004 y 2005, quebró tres veces el récord mundial al
aire libre en seis semanas.
El 11 de julio de este año, en Roma, sobrevoló el listón colocado
a 5.03 metros, para mejorar en dos centímetros su anterior primacía
(5.01) establecida el 12 de agosto del 2005, en Helsinski. Días
después, el 29 de julio, saltó 5.04m en Mónaco e hizo vibrar de
júbilo a más de 90 000 espectadores en el Nido de Pájaro de Beijing
al ganar el oro olímpico con primacía del orbe de 5.05m.
El 16 de febrero de este año, al comenzar la temporada, sobrevoló
el listón a 4.95m para mejorar en dos centímetros su propia marca
mundial en estadio techado, y más tarde en Valencia, España, ganó su
tercer título del orbe en sala.
El Nido de Pájaro de la capital china vio brillar también durante
los XXIX Juegos Olímpicos a las velocistas jamaicanas, que lograron
un desempeño inédito al copar el podio en los 100 lisos por
intermedio de Shelly-Ann Frazer, Kerron Stewart y Sherone Simpson.
También en los 200 el triunfo sonrió a una jamaicana, Verónica
Campbell, quien relegó a la segunda posición a la estadounidense
Allyson Felix. La medalla de bronce fue también para la isleña
Stewart. Mientras, en el salto de longitud, el cetro se lo ciñó la
brasileña Maurren Higa Maggi, con un estirón inicial de 7.04m,
válido para dejar con la plata a la favorita rusa Tatiana Lebedeva.
Otras que brillaron en Beijing y pugnaron con Isinbayeva por el
trofeo de Mejor Atleta femenina del año fueron la keniana Pamela
Jelimo y la etíope Tirunesh Dibaba.
Jelimo, quien cumplió 19 años el pasado 5 de este mes, se
proclamó campeona olímpica de los 800m, con récord mundial juvenil
de 1:54.87 minutos. La monarca africana alcanzó después en Zurich,
Suiza, la mejor marca del año: 1:54.01, aproximándose un poco más a
la primacía del orbe, fijada en 1:53.28 por la checa Jarmila
Kratochvilova, el 26 de julio de 1983.
La joven keniana ganó además este año la Golden League, al ser la
única de las participantes en dominar las seis pruebas programadas,
y la Final Mundial de Atletismo.
La etíope Tirunesh Dibaba hizo historia al lograr el doblete
olímpico en los 5 000 y 10 000m, una actuación que redondeó con el
título en el XXXVI Campeonato Mundial de Cross Country. Dibaba
también estableció una nueva marca mundial en la primera de esas
distancias durante la reunión atlética disputada el 6 de junio en
Oslo, Noruega, cuando detuvo los relojes en 14:11.15 minutos.
A los libros de récords del orbe pasaron también este año los
nombres de la etíope Dire Tune (18.517 kilómetros en la prueba de la
hora) y la rusa Gulnara Galkina, quien ganó la corona olímpica en
los 3 000m con obstáculos (8:58.81 minutos).
Ya casi al cierre de la temporada, el 13 de septiembre, en
Stuttgart, la checha Barbora Spotakova lanzó la jabalina hasta los
72.28m, para concluir un año en el que la principal figura fue, una
vez más, la dama de las alturas, Elena Isinbayeva. (PL)