Los cubanos Oreidis Despaigne, Oscar Braison y Yanet Bermoy
ganaron hoy medallas de bronce en el cierre de la Copa Jigoro Kano
de Judo, en Tokio, Japón, con la presencia de representantes de 54
países.
El profesor Justo Noda informó a la AIN que Oreidis mereció el
metal bronceado en los 100 kilos, al vencer en cuatro de los cinco
combates efectuados, dos de estos por Ippon y dos por superioridad
técnica de Yuko, mientras que la derrota la archivó en Regla de Oro.
Las victorias por la vía rápida fueron ante judocas de Mongolia y
Polonia, sus víctimas por Yuko, de Japón y Rumania, y su victimario
en tiempo extra, de la nación anfitriona.
Similar actuación tuvo Braison en más de 100, pues dispuso por
Ippon de judocas de Taipei de China y Polonia, superó por Yuko a dos
competidores locales y cayó por Ippon ante otro anfitrión.
Por su parte, el profesor Veitía destacó a la AIN el desempeño de
Bermoy, quien a pesar de combatir en su división inmediata superior,
los 52 kilos, conquistó la presea de bronce, con tres éxitos por
Ippon, uno de estos en Regla de Oro y ante una de las cuatro
japonesas en acción.
Del resto de los cubanos, Noda añadió que el 66 kilos Yordanis
Arencibia, se presentó en 73 y quedó sin medalla, con un triunfo y
un revés, mientras que Veitía agregó que la jovencita Odalis Ortiz
(+78) concluyó en el séptimo lugar, con balance de uno y dos.
El destacado preparador del equipo femenino señaló también que la
joven Onix Cortés (70) tampoco pudo subir al podio de premiaciones.
Ahora, los cubanos permanecerán hasta el día 18 en Tokio, pues
participarán en el siempre beneficioso campo de entrenamiento de la
Copa.
Noda y Veitía coincidieron en que como es tradicional, la Jigoro
Kano presentó un altísimo nivel, con la mayoría de los medallistas
olímpicos de Beijing 2008 y del mundial de Río de Janeiro 2007,
quienes reciben invitaciones con todos los gastos pagados de los
organizadores.