El fraile dominico brasileño Frei Betto aseguró hoy que la
población de Cuba tiene garantizado los tres derechos fundamentales
del ser humano, que son alimentación, salud y educación.
La obra de la Isla en este campo es un ejemplo para los países
firmantes de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y que
lamentablemente no cumplen sus postulados, dijo a la AIN el autor
del libro Fidel y la Religión (1985).
El visitante, junto a un centenar de personalidades extranjeras,
participa en un taller internacional sobre el aniversario 60 de ese
documento, en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Destacó que en Cuba no hay desapariciones de personas, ni
asesinatos extrajudiciales, ni existen niños en la calle.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos es todavía una
carta virtual, consideró el teólogo brasileño, quien reconoció la
importancia de que el texto admita que todos los seres humanos
tienen derecho a tales prerrogativas.
Betto significó que garantizar la alimentación, salud y educación
a las personas y hacer inversiones en esas esferas significaría un
paso gigantesco para muchos países.
Expresó que en Cuba existe total libertad de religión, y sobre el
particular se refirió a la reciente inauguración en La Habana de una
iglesia ortodoxa rusa.
Denunció, en cambio, a los Estados Unidos por violar los derechos
de la comunidad musulmana en esa nación.
Tras calificar a la Isla de genuinamente socialista, manifestó
que en el país caribeño se comparten los bienes del trabajo humano y
de la tierra.
Betto aseveró que Cuba es un modelo de nación humanista, que
garantiza los derechos de su población, a pesar del bloqueo
económico, comercial y financiero que le impone Washington, las
agresiones y difamaciones en su contra