Materiales y efectivo por valor de unos 40 millones de pesos
convertibles recibió Cuba hasta hoy como contribución solidaria
internacional a la recuperación de los daños provocados por los
sucesivos huracanes Gustav, Ike y Paloma.
Orlando Requeiro, viceministro para la Inversión Extranjera y la
Colaboración, en declaraciones a la AIN calificó como edificante ver
que en muchas partes del mundo surgen sentimientos de solidaridad
como los que Cuba ha practicado desde los mismos inicios de la
Revolución.
Puntualizó que de los cubanos, su esfuerzo y dedicación depende
en primer término revertir los estragos de los meteoros, pero es
importante el germinar de esas semillas de solidaridad en un mundo
de egoísmos, muy necesitado de estas demostraciones de alto
contenido humano.
Los donativos se destinan a la reconstrucción de viviendas,
escuelas, restauración de redes eléctricas y de sistemas de
acueductos e incluyen los aportes de países ricos y pobres, de
ciudadanos individuales y hasta niños, en un diario acontecer sin
precedentes, apuntó.
Junto a recursos materiales y financieros se ha contado con los
aportes de brigadas venezolana para la reconstrucción de escuelas,
de linieros de San Vicente y Granada, voluntarios norteamericanos, y
ofrecimientos de pueblos hermanos como Colombia, México y República
Dominicana.
La solidaridad se manifiesta hacia la Isla y de ella al mundo,
pues Cuba incrementa la contribución internacional y un ejemplo
contemporaneo es el aeropuerto que ejecuta, junto a otros paises, en
San Vicente y Las Granadinas, obra que calificó entre las mayores
que se construyen hoy en el Caribe.