En los últimos años la mortalidad materna se ha elevado en casi
todo el mundo, debido fundamentalmente al incremento en el número de
césareas, aseguró la doctora Aniett García.
En Cuba sucede lo mismo, por lo que reflexionar sobre los
factores que originan esos decesos es vital para incidir en ellos,
agregó la experta, quien participa en el VIII Congreso
Centroamericano y del Caribe de Anestesiología, Reanimación y Dolor.
García destacó que en la paciente obstétrica, aproximadamente el
82 por ciento de las muertes se asocian a la operación cesárea, en
particular a complicaciones anestésicas (broncoaspiración, paro
cardiorrespiratorio, ventilación inadecuada), reporta la Agencia
Prensa Latina.
Explicó también que el tromboembolismo pulmonar, las
cardiomiopatías y complicaciones quirúrgicas, son afectaciones
frecuentes de la parturienta en las naciones desarrolladas.
Sin embargo, en países de bajos ingresos, las mujeres mueren por
eclampsia o hipertensión durante el alumbramiento, hemorragias,
sepsis y parto obstruido.
Resaltó que la anestesia obstétrica debe ser realizada por
profesionales entrenados y con alta calificación científica en
instituciones con equipos de tecnología avanzada que permitan
brindar una atención de alta calidad.
Además se deben evitar los errores sistemáticos, así como
promover la superación de los especialistas dedicados a esta
actividad, única forma de garantizar la vida de la madre y el feto,
concluyó.
Más de 500 expertos de América central, el Caribe y otros estados
de Latinoamérica participan en el cónclave que sesiona en el Palacio
de Convenciones de la Habana.