Los cederistas matanceros volvieron a tener otro buen año, y esta
vez esa energía de participación popular sirvió para merecer la
condición de Vanguardia Nacional de los CDR y ocupar el primer lugar
en la fraterna emulación.
El mayor y mejor mérito de los yumurinos reside en la
perseverancia en el trabajo. Es admirable cómo han podido mantenerse
en el pelotón de vanguardia durante los últimos once años, en tres
de los cuales resultaron punteros en la porfía nacional. Sin duda,
la provincia más estable.
En la última etapa tuvieron un desempeño sobresaliente los
municipios de Varadero y Matanzas, reconocidos con la condición de
Vanguardia Nacional. También descollaron Ciénaga de Zapata, Los
Arabos, Calimete y Pedro Betancourt.
A juicio de Osmani Sánchez Díaz, secretario organizador de los
CDR en la provincia, existe una notable motivación en el pueblo para
acometer las más diversas tareas y, en especial, aquellas
relacionadas con la defensa de la Revolución.
Sostuvo que el funcionamiento de la organización constituye un
elemento activo en Matanzas y ha sido constante, además, la acción
por disminuir el delito en las comunidades. Es igualmente relevante
el número de donaciones voluntarias de sangre, la recuperación de
materia prima, la repoblación forestal, el aporte de los jubilados a
la defensa y la eficacia de los destacamentos Mirando al mar.
Los matanceros celebran este resultado a sabiendas de que el
mérito es también un desafío para mejorar en otras muchas
encomiendas en las que los CDR asumen también un papel decisivo. No
basta con tener una localidad bonita y limpia. Es preciso juntar ese
entusiasmo con valores humanos afirmativos, sin concesiones de
ninguna clase.