.— Para Estados Unidos es
inevitable una retirada del ocupado territorio iraquí, decisión cada
vez menos relacionada con quién será el próximo presidente, asegura
hoy un editorial del diario The New York Times.
El candidato demócrata, Barack Obama, tiene un plan específico
para evacuar las tropas del país árabe, mientras que el republicano,
John McCain, sería incapaz de mantenerlas allí por mucho tiempo,
advierte el rotativo.
Según el influyente periódico, sin sacar efectivos del sangriento
conflicto el Pentágono no podría reforzar su presencia en
Afganistán, donde incluso -estima- corre peligro de perder la
guerra.
Por si fuera poco, el gobierno de Iraq ya decidió que es hora de
pensar en un cronograma de salida de militares norteamericanos,
elemento colocado en el centro de las negociaciones para un pacto de
seguridad Bagdad-Washington, señala la fuente.
Autoridades del país invadido hace más de cinco años fijaron para
2011 el repliegue de las tropas extranjeras, a menos que ellos
soliciten su permanencia.
Aunque dicho plazo es superior al propuesto por Obama, resulta
suficiente para entrar en contradicción con las pretensiones de
quedarse, expresadas por el presidente George W. Bush y su
correligionario McCain, opina el Times.
De acuerdo con el diario neoyorquino, en los recientes debates
electorales Obama-McCain, el aspirante republicano a la Casa Blanca
insistió en triunfar en la contienda iraquí, algo bien distanciado
de la realidad.
Seguimos sin entender qué quiere decir el político de 72 años
cuando habló de victoria, la cual sólo pudiera llegar por arte de
magia, comenta el rotativo.
El periódico recuerda que los propios comandantes de la ocupación
se limitan a calificar de frágiles los avances alcanzados en materia
de seguridad, mientras la nación árabe da claras muestras de que
nunca será la estable democracia pronosticada por Bush y McCain.
Estados Unidos mantiene más de 140 mil soldados en Iraq, donde
admite la pérdida de casi cuatro mil 200 soldados y heridas a otros
30 mil.