Los recientes ataques terroristas constatan que Georgia no renunció a la política de terrorismo de Estado contra Osetia del Sur, afirmó el gobernante en declaraciones a la televisión.

Dijo que no existen dudas en la responsabilidad de los servicios especiales georgianos por los sendos bombazos que estremecieron este viernes al territorio oseta, uno de los cuales impactó en el Estado Mayor de pacificadores rusos en Tsinvalí.

Según la agencia ITAR-TASS, Kokoity confirmó la muerte de seis militares y cuatro heridos, casi todos rusos al parecer.

El ministro de Interior de Osetia del Sur, Mijail Mindzaev, citado por la agencia Interfax, informó que seis efectivos murieron en el lugar de los hechos y uno falleció posteriormente en el hospital.

Fuentes militares osetas indicaron que explotó uno de los dos vehículos marca UAZ confiscados por los pacificadores rusos bajo sospecha de trasladar armas. El hecho ocurrió cerca de la zona de seguridad del conflicto georgiano-oseta.

Con anterioridad este mismo viernes se produjo otra detonación con saldo de dos heridos en la región de Leningorsk.