.— En políticos estadounidenses
imperan sentimientos anti-inmigrantes, aunque suelen mostrar falsas
posturas públicas de apoyo a esas personas, advierte hoy el diario
The New York Times.
Si fueran ciertas sus declaraciones, al congreso de este país le
resultaría mucho más fácil aprobar sencillas legislaciones
migratorias, estimó un editorial del rotativo.
De acuerdo con el influyente periódico, el rechazo a los
indocumentados genera trabas burocráticas que cada año demoran y
obstruyen miles de visas de residencia permanente, llamadas tarjetas
verdes.
Ante semejante comportamiento, muchos extranjeros se ven
obligados a burlar el sistema para reunirse con sus familiares o
conseguir trabajo, lamenta el Times.
La situación de unos 12 millones de inmigrantes ilegales
estimados en Estados Unidos y las políticas gubernamentales al
respecto desatan polémica en la opinión pública norteamericana.
Uno de los temas debatidos es la creciente represión a los
indocumentados, caracterizada por redadas, encierros y maltratos en
centros de detención.
Grupos defensores de los derechos humanos critican a la agencia
de Control Aduanero y Migratorio, la cual realiza operaciones en
puestos de trabajo y no garantiza adecuadas atenciones médica y
legal para los extranjeros que encarcela.