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El creciente respaldo de los movimientos indígenas a los procesos
revolucionarios de América Latina ratifica hoy la eterna lucha de
los pueblos originarios por el reconocimiento de sus costumbres y
tradiciones.
Casi siempre olvidadas por la mayoría de los gobiernos del
continente, las comunidades aborígenes apoyan en estos momentos las
transformaciones que ocurren en diferentes naciones de la región.
En conversación con Prensa Latina, el diputado venezolano
Diógenes Palau afirmó que los pueblos indígenas están jugando un
papel muy importante en la integración latinoamericana.
Ahora vemos a nuestros hermanos en el combate por las
reivindicaciones sociales que se producen en Ecuador, Bolivia,
Paraguay y Venezuela, comentó el parlamentario.
Puntualizó que los indígenas desempeñaron un rol fundamental
contra los intentos de derrocar al presidente boliviano, Evo Morales
y en el referendo ecuatoriano para aprobar la nueva constitución.
Como lo han hecho siempre, las comunidades originarias resistirán
los embates imperialistas y oligárquicos, y continuarán protegiendo
sus tradiciones, recalcó Palau.
Durante la VII Cumbre Social por la Unión Latinoamericana y
Caribeña, celebrada del 24 al 27 de septiembre en varias ciudades
venezolanas, representantes indígenas de 10 países revalidaron sus
posiciones para enfrentar problemas comunes.
Entre los temas discutidos por voceros de Argentina, Chile,
Bolivia, Colombia, Perú, Paraguay, Ecuador, Brasil, Uruguay y
Venezuela estuvieron la realidad social, política y económica de
diversas etnias, y el reto que tienen por delante en aras de
reafirmar sus derechos y cultura.
Hoy tenemos voz en América Latina, y estamos decididos a salvar
esta patria y al mundo entero, apuntó en el encuentro, con sede en
el estado de Bolívar, la ministra venezolana para los Pueblos
Indígenas, Nicia Maldonado.
Reiteradas veces, la titular ha sostenido que las comunidades
originarias resurgen actualmente con más fuerza en busca de la
dignidad.
En opinión del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, los pueblos
indígenas tienen mucho que aportar al socialismo del siglo XXI en
cultura, formas de vida y modos de producción.
Recientemente, el jefe de Estado indicó que para construir ese
modelo es necesaria también la incorporación de las tradiciones más
profundas.
Debemos crear un fuerte movimiento indígena continental destinado
a fundar una gran patria que honre las sanas costumbres y sabiduría
de los aborígenes, señaló.
Ha llegado, agregó, una nueva hora, la de la libertad, y allí
estarán los indios creando la patria socialista y soberana para
nuestros hijos.
Particularmente, los derechos de los indígenas venezolanos están
recogidos en la Constitución de 1999 con el objetivo de garantizar
el desarrollo de las etnias sobrevivientes y mantener su cultura,
medicina y sociedad.
El texto también promueve la preservación del hábitat de esas
comunidades para impedir la depredación de aquellos lugares donde
vivieron durante miles de años.
Entre las acciones ejecutadas por el gobierno de Chávez a favor
de los indígenas sobresalen la educación bilingüe, la asistencia
sanitaria, el otorgamiento de tierras y los programas para rescatar
valores originarios como parte de la formación del país.