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Un soldado británico murió y otros seis resultaron heridos en la
conflictiva provincia sureña de Helmand durante un ataque de
insurgentes afganos que ascienden hoy a 112 los militares fallecidos
de esa nacionalidad en esta nación islámica centroasiática.
De esa forma, portavoces de la OTAN en Kabul confirmaron un parte
de guerra difundido en Londres por el Ministerio de Defensa de Gran
Bretaña sobre esa pérdida ocurrida anoche en el distrito de Sangin.
Según las fuentes, las bajas pertenecen al Cuerpo de Veterinarios
de la armada real británica, adjunto al regimiento de paracaidistas,
y realizaban un patrullaje en esa región cuando fueron atacados con
fusiles automáticos de asaltos.
Mientras, el Ministerio del Interior informó que tres supuestos
rebeldes perdieron la vida hoy durante un enfrentamiento con la
policía en el distrito sureño de Gereshk, de la provincia de Helmand.
Sin embargo, las fuentes declinaron comentar el total de muertos
y heridos registrados entre los integrantes de las fuerzas
gubernamentales.
Por su parte, voceros de la embajada de Berlín en Kabul
comunicaron a medios informativos que el ministro de Relaciones
Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, llegó hoy por
sorpresa a la ciudad afgana de Herat.
Steinmeier recorrerá durante su tercera visita a Afganistán
proyectos económicos y culturales financiados por su país y visitará
al contingente expedicionario alemán desplegado en la región.
Alemania tiene estacionado en este territorio más de tres mil 500
soldados. El gobierno de Berlín pretende aumentar este contingente
en otros 1.000 soldados a partir del próximo otoño, que se inicia en
septiembre.