Los
empresarios cubanoamericanos Carlos y Jorge De Céspedes, los dueños
de la corporación farmacéutica en bancarrota Pharmed Group, ambos
acusados de un fraude multimillonario contra hospitales y de evasión
tributaria en un escándalo financiero que asombró a Miami,
pertenecen al consejo de dirección de MasTec, la firma de Jorge Mas
Santos, el virtual dueño de la Fundación Nacional Cubanoamericana (FNCA)
con la cual tienen también fuertes vínculos.
Tan amplia es la relación de los dos estafadores con el clan Mas
y la Fundación que en el 2005, Carlos De Céspedes fue uno de los
personeros que acompañaron a la ex presidenta panameña Mireya
Moscoso en el avión personal de Mas Santos. Moscoso viajaba entonces
a Washington invitada por el senador federal Mel Martínez a su
juramentación como primer senador de Estados Unidos de origen
cubano.
Carlos, de 58 años, y Jorge De Céspedes, de 55, pertenecen a la
alta dirección de MasTec desde el día primero de noviembre de 2004.
Usan como dirección el 3155 NW 77th Ave Doral, FL 33122, sede
principal de MasTec.
La MasTec es propiedad de Jorge Más Santos, el actual Jefe de la
FNCA, grupo miamense patrocinador de numerosos actos de terrorismo
contra Cuba que pretende enseñar a la Isla las virtudes del
capitalismo.
Jorge Mas Santos y su hermano Juan Carlos, hijos del fallecido
empresario y agente de la CIA Jorge Mas Canosa, enfrentan en España
acusaciones criminales en relación con un fraude que alcanza 59,4
millones, realizado con la complicidad del politiquero derechista
español José María Aznar.
Carlos de Céspedes también pertenece al consejo de dirección de
la Florida International University (FIU). Esta institución es
famosa por su Instituto de Investigaciones Cubanas dirigido por el
ex analista CIA Jaime Suchlicki y un programa de la CIA para
entrenar a distancia agentes y mercenarios usados por la Sección de
Intereses Norteamericanos en La Habana, bajo la falsa apelación de
periodistas "independientes".
El estadio de baloncesto de la FIU lleva el nombre de Pharmed.
Fue también miembro del consejo de la Fundación ALS de la
Universidad de Miami e, irónicamente, de la Alianza para un Gobierno
Ético (Alliance for Ethical Government).
El dinero robado al hospital Kendall Regional Medical Center ("Kendall
Regional"), de Miami Dade, con falsas ventas de suministros, se
manejaba a través de las empresas fantasmas Kaufman Medical Products,
Medical Consulting of America Hospital Consulting of America así
como la SoHo Marketing, controlada por Silvia Oramas, y Gator Sports
Collectibles, manejada por la vicepresidenta adjunta de Pharmed,
Erika Urquiza.
Joanna Delfel y Victor García, dos ex empleados corruptos usaron,
a solicitud de los De Céspedes, el sistema de computación de la
institución para emitir órdenes de compra a favor de Pharmed Group.
Lo mismo ocurría con el hospital Jackson, administrado por
el Condado Miami-Dade, con la complicidad del
Comisionado José "Pepe" Díaz.
Colmo de la desfachatez, Carlos y Jorge De Céspedes que se
pretendían grandes mecenas con obras caritativas en Miami,
presentaron documentación para recuperar los impuestos de estas
transacciones fraudulentas.
De esta forma, Carlos De Céspedes se embolsó 2 286 199 dólares en
2001, 4 858 147 en 2002 y 3 751 750 en 2003, mientras Jorge De
Céspedes hacia lo mismo con 2 286199 en 2001, 4 858 147 en 2002 y
3 751 750 en 2003.
Carlos De Céspedes, el director y jefe ejecutivo de la empresa, y
su hermano Jorge, presidente y director, son hijos de un próspero
cirujano dentista cubano que los mando a Estados Unidos a través de
la Operación "Peter Pan", orientada por la CIA, con la cual 14 000
niños salieron de Cuba sin sus padres poco después del triunfo de la
Revolución. Al contrario de muchos otros, internados en campos de
refugiados en condiciones precarias, los De Céspedes vivieron en
casa de amistades hasta la llegada de sus familiares.
La empresa de los De Céspedes, Pharmed Group, fue una de las más
importantes distribuidoras de productos farmacéuticos y suministros
médicos de la Florida con ventas en el sureste de EE.UU., el Caribe
y Latinoamérica.
Sin embargo, Pharmed declaró quiebra en octubre de 2007 bajo el
pretexto de la pérdida de un importante contrato de distribución con
la Johnson & Johnson y evocando deudas de 72 millones de dólares.
Lo que no impide a Jorge de Céspedes y su esposa, Yvonne, de
disfrutar de una residencia valorada a 1.7 millón de dólares y de un
condominio de 450 000 dólares en Hollywood, Florida, frente al mar.
Carlos de Cespedes y su esposa, Martha, viven en su modesta mansión
de la costa de Coconut Grove, valorada a 2.4 millones.
Los hermanos De Céspedes afrontan 20 años de cárcel por
conspiración para cometer fraude y cinco años por evasión
tributaria.
Gracias a un sistema judicial tan complaciente con la gente
adinerada como con los terroristas cubanoamericanos, los
Céspedes andan Miami en libertad bajo una fianza de unos 250
mil dólares cuando robaron instituciones y al Estado por una
cantidad que se acerca a los 30 millones.
Los dos seudo filántropos cubanoamericanos siguen visitando el
café Versalles, al timón de sus lujosas Bentleys, lo normal en la
ciudad más corrupta del país que predica la virtud al resto del
mundo.