Investigadores nacionales e 
			internacionales valoran desde hoy aquí los efectos negativos para 
			Bolivia de los fenómenos climáticos El Niño y La Niña, para valorar 
			acciones preventivas.
			De acuerdo con el comité organizador, a la cita científica 
			asistirán expertos de Naciones Unidas y representantes de los 
			ministerios de Defensa, Salud y Educación.
			En el taller se expondrán las lecciones aprendidas en la etapa de 
			preparación y respuesta a los eventos vividos entre los años 2007 y 
			2008.
			Entre los temas a tratar sobresalen los daños al sistema nacional 
			de enseñanza y el brote de epidemias como consecuencia de intensas 
			lluvias e inundaciones sobre todo en los departamentos de Santa 
			Cruz, Beni, Cochabamba y Pando.
			También centrarán los debates temas como la seguridad 
			alimentaria, nutrición y el Plan Nacional de Rehabilitación y 
			Recuperación aplicado en Bolivia para este tipo de emergencias.
			Bolivia perdió 517 millones dólares debido a los efectos de La 
			Niña, que azotó al país andino desde noviembre pasado, según un 
			informe de la Comisión Económica para América Latina y Caribe 
			(CEPAL).
			Las pérdidas contabilizadas, unos 341 millones de dólares 
			corresponden a daños en cultivos y los restantes 176 millones a las 
			carreteras y caminos que se vieron afectados.
			El segundo efecto ocasionado por el fenómeno de La Niña en la 
			economía fue la reducción de la oferta de alimentos que a su vez 
			repercutió en un alza de precios en algunos productos agrícolas.
			De acuerdo con el Viceministerio de Defensa Civil, las intensas 
			lluvias, riadas e inundaciones afectaron a 121 mil 145 familias y 
			dejaron 80 fallecidos y cinco desaparecidos.
			Bolivia recibió ayuda humanitaria de organismos y países como 
			Naciones Unidas y el Banco Mundial, así como de Perú, Chile, Brasil, 
			Venezuela, Alemania, Cuba, España, Argentina, Japón y Estados 
			Unidos, entre otros.