Ganar
el segundo lugar en el Grand Prix, detrás del invicto Brasil,
representa un apreciable mérito para la selección cubana de voli.
Mas, ante la inminencia de los Juegos Olímpicos, es preciso
analizar los pro y los contra de esta actuación en una lid en la que
participaron seis de los 12 elencos clasificados para Beijing.
El cuadro antillano reafirmó su alineación regular y mostró la
validez de su sistema de juego —con dos pasadoras desdobladas en
rematadoras—, pero al apenas realizar ataques zagueros tornó menos
variada su ofensiva, acentuada por las esquinas. Daimí Ramírez
concluyó primera en el ataque (excelente 56.04% de efectividad), y
su par, Yanelis Santos, fue segunda en el servicio, al trabajar para
0.40 puntos anotados por set.
La capitana Yumilka Ruiz disfrutó de un gran momento. Marcó en
los cinco partidos 77 puntos para colocarse tercera entre las
máximas anotadoras y en el ataque (50.00%). Ella, junto a Kenia
Carcasés, titular a partir del choque contra Estados Unidos,
constituyeron la piedra angular del elenco a la ofensiva.
Satisfizo sobremanera el desempeño de Zoila Barros. Al parecer,
con la pérdida de peso dejó atrás la sombra de aquel percance en el
tobillo que la agobió durante los últimos tiempos y ocupó con éxito
la plaza de la lesionada Nancy Carrillo, quien debe darle unos días
de descanso a su mano derecha. Su compañera y novel central, Rachel
Sánchez, pudiera hacerse sentir más por esa zona del terreno, sobre
todo en el ataque, porque como bloqueadora ocupó el octavo peldaño
del clásico.
La alegría por la victoria no es razón para soslayar algunas
preocupaciones. Perder frente a las brasileñas, monarcas en siete
ocasiones del Grand Prix (GP), era una de las posibilidades, aunque
no tan desproporcionado: 14-25, 15-25, y 20-25. Las nuestras no
descifraron el servicio rival, además, cometieron excesivos errores,
hubo falta de cohesión y se mostraron sin empuje para reaccionar.
Durante los cinco desafíos del GP, el director técnico Antonio
Perdomo ofreció pocas oportunidades a la reserva, solo sustituyó a
Calderón por Carcasés, pues el cambio de Barros por Carrillo se sabe
fue obligado por las circunstancias, así el elenco enfrentó sus
compromisos con escaso margen de recuperación para las titulares.
Apenas vieron acción Yaíma Ortiz, Yusleinis Herrera y la
levantadora Yusidey Silié, las dos últimas de poca experiencia. De
manera que en los Juegos Olímpicos, un torneo en extremo difícil con
un calendario intenso, serán las seis regulares quienes lleven una
carga pesada, y desde ahora han de estar conscientes de que esa va a
ser la realidad.
Finalistas del GP: Brasil (5-0), Cuba (4-1), Italia (2-3), EE.UU.
(2-3), China (1-4), Japón (1-4). Del séptimo lugar en adelante:
Turquía, Alemania, R. Dominicana, Polonia, Tailandia y Kazajstán.