Al analizar comentarios sobre una posible agresión de Israel a territorio iraní, Mullen indicó que abrir un frente en esa nación complicaría la situación de las tropas norteamericanas en Iraq y Afganistán.

El general ofreció una conferencia de prensa en la sede del departamento de Defensa, en la que se manifestó partidario de mantener el camino de la diplomacia para solucionar el conflicto de su gobierno con Teherán.

Washington niega a la nación persa el derecho a desarrollar la energía nuclear con fines pacíficos, y acusa a su gobierno de andar en busca de tecnología para enriquecer uranio y adquirir la bomba atómica.

Mullen, quien visitó Tel Aviv este fin de semana, se negó a hablar sobre qué versaron sus conversaciones con las autoridades israelíes, pero dejó clara su oposición a la guerra por sus impredecibles consecuencias para Estados Unidos.

Esto no significa que nosotros no tengamos capacidad o reserva, acotó el general, quien desestimó que los iraníes tengan condiciones para obstaculizar el comercio petrolero en la región del Golfo Arábigo Pérsico en caso de ser agredidos.

Las palabras de Mullen aparecen en medio de una intensificación del conflicto entre Estados Unidos e Irán, cuyos representantes manifestaron en los últimos días su intención de defender a toda costa los derechos de su pueblo a la energía nuclear.