Bolivia consideró hoy que el
Decreto Retorno sobre expulsiones a inmigrantes adoptado por la
Unión Europea (UE) mina el clima de confianza entre los países en
vías de desarrollo con el bloque comunitario.
En rueda de prensa en esta capital, el canciller boliviano, David
Choquehuanca, calificó de gran decepción el hecho de que el
Parlamento Europeo aprobara un documento que desconoce las raíces
del problema y puede afectar a mujeres y niños.
El encarcelamiento (hasta 18 meses) de personas y su posterior
expulsión puede ser traumático en muchos casos y lesiona los
derechos humanos de los ciudadanos. Es inaceptable y ha sido
condenada por muchos países, organizaciones y sectores, dijo.
Choquehuanca recordó que la Organización de Estados Americanos
(OEA), el Mercado Común del Sur (MERCOSUR), el Grupo de Río y hasta
el propio Vaticano rechazaron la medida, así como los defensores del
pueblo reunidos recientemente en Nicaragua.
Vamos a tratar de ayudar para resolver estos asuntos en contactos
bilaterales con los países de la UE, pero ciertamente la Directiva
lesiona las relaciones con el grupo europeo, tal como adelantara el
presidente Evo Morales, argumentó.
Respecto a los reclamos bolivianos de una salida al mar a Chile,
destacó que por primera vez en mucho tiempo se construye un lazo de
cooperación y amistad sincera entre los dos gobiernos y poco a poco
pudiera avanzarse en esa dirección.
En otro orden, el jefe de la diplomacia de La Paz admitió que no
conoce en detalles el diferendo actual con Perú, ya que salió de su
país en una gira europea el domingo pasado, para visitar Bruselas y
ahora París.
Peruanos y bolivianos somos pueblos hermanos, nos confundimos
unos con otros en las fronteras, hablamos el mismo idioma. Somos
familia y en las familias a veces hay problemas, pero ninguno que no
pueda resolverse, sentenció.
De otro lado, subrayó la transparencia del proceso de
transformaciones que vive su país que calificó de abierto,
democrático y sin exclusiones.
En una conferencia ofrecida en la Maison de L Amerique Latine de
París, Choquehuanca deploró que grupos de poder económico, con
influencia determinante sobre los medios, se empecinen en tratar de
hacer prevalecer fórmulas corruptas del pasado.
El referendo revocatorio convocado para el 10 de agosto en
Bolivia va a confirmar la justeza del proceso en marcha en nuestro
país, aunque no faltarán los deseos de boicotearlo por parte de una
minoría de las oligarquías financieras, consideró.
Vinimos al gobierno a cumplir una misión, que llevaremos a cabo
mientras contemos con el apoyo mayoritario de la ciudadanía. Y
cuando termine nuestro mandato, nos iremos con la frente alta, sin
el favor del enriquecimiento personal debido a la corrupción, acotó.