La bandera cubana se izó hoy junto a la estadounidense en el
monumento que en la ciudad de La Habana rinde tributo a los esposos
Rosenberg, ejecutados injustamente, hace 55 años, por las fuerzas
fascistas de su país.
Basilio Gutiérrez, vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad
con los Pueblos, y Georgina Chavau, funcionaria del Comité Central,
colocaron una ofrenda floral en el monolito de Zapata y Paseo como
tributo del pueblo de la Isla a las primeras víctimas del fascismo
norteamericano.
José Ramón Rodríguez, presidente del Movimiento Cubano por la Paz
y la Soberanía de los Pueblos, condenó la política genocida y
represiva del gobierno de Estados Unidos que actúo con total
impunidad al condenar a la silla eléctrica a Ethel y Julius
Rosenberg.
Política que, agregó, mantiene encarcelados a cinco jóvenes
cubanos por luchar contra el terrorismo mientras apoya y protege a
autores de crímenes de lesa humanidad como Posada Carriles, ante el
desprecio de la opinión internacional.
Presas de una increíble red de mentiras, delaciones y pruebas
falsas, los esposos Rosenberg fueron tratados por la propaganda
macartista como dos peligrosos espías prosoviéticos.
Culpados de la entrega de secretos militares relacionados con la
construcción de la bomba atómica a la Unión Soviética, los
ciudadanos norteamericanos Ethel y Julius fueron ejecutados el 19 de
junio de 1953