Tal posición, aún cuando llamó a la reconciliación en rueda de prensa anoche, hace que prevalezcan hoy las diferencias con el presidente de la Liga Musulmana de Paquistán N (PML-N), Nawaz Sharif.

Ambos partidos -las principales fuerzas políticas del país- desean solucionar el problema de los letrados, expulsados por el presidente Pervez Musharraf en impopular medida el pasado noviembre, pero difieren en cómo hacerlo.

El PML-N quiere que se haga mediante una orden ejecutiva, mientras el PPP a través de una enmienda a la Ley de Jueces avalada por el Parlamento.

Tras suspender a los magistrados cuando declaró el estado de excepción, Musharraf nombró otros, y esto complica la situación.

En opinión de Zardari, si se decreta la restauración de los jueces mediante una orden ejecutiva, los actuales letrados en funciones podrían emitir una orden para quedarse, lo cual generaría una crisis constitucional. Zardari dijo que una resolución para el retorno de los magistrados a sus puestos será presentada en una sesión conjunta del Parlamento. Una de las ideas que se maneja es ampliar el número de miembros de la Corte Suprema de los actuales 17 a más de 25.

Nuestro equipo prepara un anteproyecto y explora formas y medios para resolver el asunto, dijo Zardari.

En cuanto a la decisión del PML-N de abandonar el gobierno de coalición, incluso en la provincia de Punjab, dijo que le gustaría que Sharif y su organización participaran, pero que su partido tiene mayoría para formar el Gabinete central y el de Punjab.