.
— Un escolta del gobernador de Bagdad, Hussein al Tahan, pereció hoy y
otras seis personas fueron heridas por la explosión de una bomba en el
centro de esta capital, informó la policía iraquí.
Las fuentes dijeron que la explosión se produjo al paso de una
caravana con los guardaespaldas del funcionario público cerca de la
plaza de Nasser.
En Ciudad Sader, en el este de Bagdad, milicianos de la comunidad
musulmana chiíta se enfrentaron a tropas nacionales y estadounidenses,
lo cual causó anoche siete muertos y 19 heridos.
Según la policía y el personal médico, los cadáveres eran todos de
adultos masculinos, pero entre los lesionados había tres mujeres y
tres niños.
Medios de prensa hicieron referencia a que el movimiento de
oposición parlamentaria de Moqtada al Sader alcanzó un acuerdo con la
alianza gubernamental para poner fin a la violencia en ese populoso
barrio.
No obstante, los intercambios de disparos en forma esporádica
continúan, lo cual pone en duda hasta dónde llega el control de
Moqtada sobre los milicianos que operan en Ciudad Sader.
Un atentado con bomba la víspera en un funeral en la occidental
provincia de Al Anbar causó 30 muertos y 20 heridos, según el último
balance emitido este jueves por la policía.
El atacante hizo estallar las cargas que llevaba adosada a su
cuerpo en medio de las honras dedicadas al director de una escuela
asesinado un día antes.
Ninguna organización ha reivindicado la autoría del atentado con
explosivos, que coincidió con la ejecución de una campaña
contrainsurgente en la norteña ciudad de Mosul.
El primer ministro Nuri al Maliki se dirigió hacia esa urbe para
supervisar la nueva ofensiva.