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El vicepresidente cubano Carlos Lage alertó hoy sobre el sostenido
encarecimiento de los alimentos, como parte de una lógica capitalista
donde importa la ganancia y no la satisfacción de las necesidades.
Al intervenir en el marco de la cumbre extraordinaria de la
Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), el
representante de la isla advirtió de las afectaciones para amplios
sectores de la población.
Los industrializados destinan cerca del 10 por ciento de sus
recursos a la compra de alimentos, mientras que los pobres y
subdesarrollados llegan a dedicar hasta el 65 por ciento.
Por ello, añadió Lage, no tienen respuesta para enfrentar ese
escenario las economías de los países subdesarrollados.
El origen de esta crisis está en un orden económico internacional
injusto, donde las potencias desarrolladas cuentan con extraordinarios
presupuestos dedicados a preparar guerras y a llevarlas a cabo.
En ese sentido, mencionó el caso de Estados Unidos que destina cada
año a esos objetivos unos 500 mil millones de dólares, a lo cual se
suma el manejo irresponsable de la economía norteamericana que está en
recesion.
Una de las principales distorsiones está además en el hecho de que
esa nación sostiene un enorme déficit fiscal que el propio Fondo
Monetario Internacional (FMI) no permitió a ningún país del tercer
mundo, dijo el vicepresidente cubano.