LAS TUNAS.— El invicto paso que hasta ahora marcan Venezuela (12
puntos) y Centrales (9) constituye la nota más relevante y centro de
interés para cientos de aficionados que diariamente concurren a la
sala polivalente Leonardo McKenzie Grant, con el propósito de
disfrutar las hostilidades entre los siete equipos que intervienen
en el fútbol sala correspondiente a la IV Olimpiada.
Haciendo gala del oficio que los distingue, pases muy precisos,
ataques hacia las esquinas, cohesión y un dinámico ritmo sobre el
tabloncillo, los venezolanos acumulan cuatro triunfos de forma
consecutiva y parecen decididos a dorar su actuación, para lo cual
tendrán que doblegar este miércoles a un Centrales que tampoco ha
conocido la derrota.
Abrazados en una posición intermedia continúan batallando los
conjuntos de Orientales y la selección nacional de Universitarios (6
unidades) seguidos por Occidentales (3) y la Universidad de las
Ciencias Informáticas, y la Escuela Internacional de Educación
Física y Deportes, sin victorias aún.
Individualmente, sobresalen Yosnier Mesa (Centrales) con siete
goles, seguido del venezolano José Espinosa (6), mientras Wilfredo
Carbó (OCC) continúa demostrando virtudes físicas y técnicas
elogiadas por Víctor Aragón, vicepresidente de la asociación cubana
de fútbol.
La inserción del fútbol sala en esta IV Olimpiada (antes solo a
modo de exhibición) sucede en un momento muy oportuno tanto para
Venezuela como para los integrantes de la selección nacional cubana,
con vistas al Mundial, previsto para octubre, en Río de Janeiro.