Intelectuales de diversas partes del mundo hicieron un llamado
internacional en el que denuncian la conspiración antiboliviana de
la oligarquía subordinada al imperialismo, que pretende desmembrar a
esa nación sudamericana.
Firmado por más de 200 prestigiosos intelectuales por iniciativa
de la Red de Redes en Defensa de la Humanidad, el documento comenzó
a circular en la conferencia de prensa ofrecida por el presidente
Evo Morales, luego de la inauguración el lunes de la séptima sesión
del Foro Permanente de Asuntos Indígenas en Naciones Unidas.
Avalan el llamamiento los Premios Nobel de la Paz, Adolfo Pérez
Esquivel, de Argentina, y Rigoberta Menchú, de Guatemala; el célebre
arquitecto brasileño Oscar Niemeyer, el escritor uruguayo Eduardo
Galeano, el historiador norteamericano Howard Zinn, su reconocido
compatriota Noam Chomsky, el politólogo británico Richard Gott y el
periodista francés de origen español Ignacio Ramonet.
Destacan también las rúbricas del ex fiscal general de EE.UU.,
Ramsey Clark, el poeta nicaragüense Ernesto Cardenal, la novelista
mexicana Elena Poniatowska, el dramaturgo español Alfonso Sastre, el
poeta brasileño Thiago de Mello y los luchadores independentistas
puertorriqueños Juan Mari Bras y Rafael Cancel Miranda.
En el amplio espectro de firmantes, que respaldan al Gobierno del
presidente Evo Morales, sus políticas de cambio y el proceso
constituyente soberano del pueblo boliviano, ocupan un prominente
lugar músicos como el hispanofrancés Manu Chao, el cubano Silvio
Rodríguez, el puertorriqueño Danny Rivera, el dominicano Víctor
Víctor, el argentino Víctor Heredia, la venezolana Cecilia Todd y el
chileno Pancho Villa.
Varios intelectuales cubanos, entre los que se cuentan escritores
merecedores de Premios Nacionales de Literatura y de Ciencias
Sociales, suscriben el documento que alerta sobre cómo "las acciones
subversivas y anticonstitucionales con que los grupos oligárquicos
pretenden dividir la nación boliviana, reflejan la mentalidad
racista y elitista de estos sectores y constituyen un peligrosísimo
precedente, no solo para la integridad de ese país, sino también
para la de otros de nuestra región".