Una tarja en recordación al combatiente internacionalista Salvador 
          Valdés Campos fue develada en el municipio habanero Bejucal por el 
          aniversario 65 de su natalicio.
          La pieza fue construida y donada por el escultor Heriberto Trujillo 
          y colocada en la dulcería Los Pinos Nuevos, donde trabajaba el mártir 
          antes de partir a cumplir una misión en África.
          Loreto Hernández, su compañero de luchas, narró pasajes de la vida 
          de Valdés Campos, como repostero, músico de los Tambores de Bejucal e 
          integrante del Batallón 178 de las Milicias Nacionales 
          Revolucionarias.
          El combatiente internacionalista partió hacia Angola en noviembre 
          de 1975 y cayó mortalmente herido en las proximidades de Cabinda. Hoy 
          sus restos descansan en el cementerio de su natal Bejucal y lleva su 
          nombre una organización de base de la Asociación de Combatientes de la 
          Revolución Cubana.