 GUANTÁNAMO.— 
			La estrategia de Yargelis Savigne para ganar la medalla de oro en 
			los próximos Juegos Olímpicos de Beijing está bien definida: luchar 
			desde el primer intento por un salto triple que deje sin opciones a 
			sus rivales.
GUANTÁNAMO.— 
			La estrategia de Yargelis Savigne para ganar la medalla de oro en 
			los próximos Juegos Olímpicos de Beijing está bien definida: luchar 
			desde el primer intento por un salto triple que deje sin opciones a 
			sus rivales.
			Esa meta tiene como antecedente el 31 de agosto del 2007, cuando 
			en su primer intento en los Campeonatos Mundiales de Atletismo de 
			Osaka, logró 15.28 metros, infranqueables para sus adversarias y 
			marca personal. "De no lograr mi objetivo en Beijing desde el primer 
			momento nunca dejaría de batallar por triunfar. En los recientes 
			Mundiales de Valencia gané el oro con el último salto", comenta.
			La saltadora llegó a esa competencia tras una lesión reciente y 
			cometió algunas deficiencias técnicas en sus primeros saltos. "Al 
			final me concentré debidamente, pensé en Cuba, en Guantánamo, y 
			destroné espectacularmente a la griega Hrysopiyí Devetzí". 
			Yargelis Savigne Herrera, revelación del atletismo cubano en los 
			últimos años, dialogó con Granma en su nueva morada en esta 
			ciudad. Natural de la comunidad de Uveral, a una decena de 
			kilómetros al suroeste de esta urbe, constituye un testimonio de que 
			en Cuba el deporte es un derecho de todo el pueblo. De ello da fe su 
			origen, en medio de una familia muy humilde. 
			Fue captada para el deporte en las clases de Educación Física. 
			Transitó por la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE), la 
			ESPA (Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético), hasta 
			afianzarse en el Equipo Nacional de la categoría absoluta. 
			Entre los sueños de esta muchacha (también especialista en salto 
			de longitud) está rebasar en este año su tope de 15.28 m en salto 
			triple, modalidad en que es más joven compitiendo. 
			"Mis ídolos fueron y son Ana Fidelia Quirot e Iván Pedroso. Sus 
			ejemplos me inspiran en cada competición", asevera esta estudiante 
			de cuarto año de Licenciatura en Cultura Física, de 23 años de edad 
			y entrenada por el laureado Milán Matos.
			
			—¿Preferencias, después del deporte?
			
			"Estudiar, leer, escuchar música, estar con mi familia y mi 
			novio, el decatlonista del equipo nacional Yosley Ascuy Povea."