Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder
Popular, afirmó hoy en la capital cubana que el voto unido el próximo
20 de enero será el reflejo de la defensa de los cubanos a su sistema
democrático.
Explicó que la esencia de la democracia de la Isla descansa en la
vinculación de los diputados con quienes representan, parlamentarios
estos que no son postulados por razones económicas sino por sus
meritos laborales y sociales.
Alarcón precisó que las actuales conquistas sociales de Cuba tienen
muchas de sus raíces en el accionar de los líderes obreros antes del
triunfo de la revolución el primero de enero de 1959, quienes
comprendieron que la unidad era la única vía posible para enfrentar al
enemigo interno y externo.
Destacó entre estos dirigentes al líder azucarero Jesús Menéndez,
asesinado el 22 de enero de 1948, en Manzanillo, localidad del oriente
cubano.
Durante el seminario científico Jesús Menéndez, ética y Tradición
Revolucionaria, cita que sesiona desde hoy en la Escuela Superior del
Partido Ñico López, Alarcón destacó que la honestidad, integridad y
visión de cubanía de este líder es el legado que actualmente muchos
cubanos tienen como guía de su realidad.
Aseveró que el general de las cañas, como definiera el poeta
nacional Nicolás Guillén en su Elegía a Jesús Menéndez, es la sangre
de la cual se nutrió el árbol de la independencia cubana y cuyos
frutos serán defendidos el domingo 20 de enero en las urnas.
El reflejo de la transparencia del proceso eleccionario cubano,
destacó Alarcón, es precisamente la custodia por los pioneros del
lugar donde el pueblo de la nación caribeña votará por la unidad, la
independencia y la soberanía.