El presidente George W. Bush
presentará hoy un paquete de medidas para tratar de reactivar la
economía de Estados Unidos, golpeada por el incremento de la deuda y
del desempleo, así como por la crisis hipotecaria.
Ante el temor de una crisis económica, desde hace semanas los
líderes de los partidos Republicano y Demócrata en el Congreso
discuten un grupo de iniciativas sobre el tema.
En ese sentido, Bush realizó la víspera una teleconferencia con los
dirigentes partidistas en el Capitolio, para informarles su propuesta.
Según trascendió, como parte del proyecto se prevé otorgar
reducciones en los impuestos sobre los ingresos y exenciones
impositivas a empresas.
No obstante, el portavoz de la Casa Blanca, Tony Fratto, evitó dar
detalles del plan, y sólo informó que Bush se dirigirá al país con una
propuesta para estimular la economía.
Pero medios de prensa aseguran que el mandatario no intentará
forzar una extensión del plan de recortes de impuestos aprobado en el
2001 y en el 2003, dada la negativa demócrata, que controla el
legislativo.
Recientemente el diario The New York Times reveló que el paquete
prevé recortar impuestos e incrementar gastos por valor de 100 mil
millones de dólares.
Esta semana el senador demócrata por Nueva York Charles Schumer
pronosticó una recesión a largo plazo en el país.
Por su parte, su colega por Massachusetts Edward Kennedy advirtió
que una crisis económica provocará la pérdida de empleos y que cientos
de miles de familias se queden sin seguro médico.
De acuerdo con las últimas encuestas, este tema es el que más
preocupa a los norteamericanos en la actual carrera hacia la Casa
Blanca.