.—
El presidente boliviano, Evo Morales, se sumó hoy a la columna de
campesinos que marchan desde hace varios días para apoyar diversas
medidas sociales y la nueva Constitución Política del Estado.
La inesperada aparición del mandatario esta madrugada arrancó
gritos de júbilo y respaldo a los casi dos mil 500 marchistas, que han
recorrido cientos de kilómetros desde diferentes departamentos del
país para llegar a la sede de gobierno.
Morales avanza a la cabeza de la manifestación, junto a líderes
sindicales y originarios, quienes rechazan las continuas trabas del
Senado a diversos proyectos beneficiosos al país, como la renta
universal de vejez Dignidad.
La norma establece desde enero próximo el pago mensual de 200
bolivianos (25 dólares) a personas mayores de 60 años de edad, pero el
Senado la aprobó con modificaciones en las fuentes de financiamiento.
Las organizaciones sociales rechazan la negativa de la cámara alta
a financiar ese beneficio con los ingresos departamentales del
Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Según el líder campesino Isaac Avalos, el Senado pretende dilatar
la medida, que consideró un salto cualitativo en la política social
del gobierno, merecedora de la aprobación del pueblo boliviano.
Avalos adelantó que esta marcha, apoyada por la Confederación
Nacional de Jubilados y Rentistas de Bolivia, demanda la ratificación
de otras leyes que "duermen" en el Senado.
La movilización respalda a la Asamblea Constituyente y su más
reciente decisión al aprobar la estructura general de la nueva carta
magna, pese a los ataques de la oposición y sus maniobras para
desestabilizar al país, remarcó.