Cerró sus puertas la fiesta del canto coral cubano

José Antonio Torres

Santiago de Cuba.— La XXVII edición del Festival Internacional de Coros concluyó ayer con una velada dedicada al Guerrillero Heroico Ernesto Che Guevara.

Ejemplar demostración de hacia dónde va lo mejor del canto colectivo contemporáneo y su impronta en la cultura universal, devino el homenaje en la Sala de Conciertos Dolores, donde unieron sus voces al compás de la Orquesta Sinfónica de Oriente, los principales exponentes de esta manifestación en Cuba y otras regiones.

Al espectáculo del cierre asistió una representación de las mejores agrupaciones vocales de la isla, desde la derivación del Coro Nacional Entrevoces hasta Exaudi, el Orfeón Santiago, Polifónico de La Habana, Música Aurea y el de la Escuela Vocacional de Arte.

Durante varios días la ciudad de Santiago de Cuba disfrutó de la maestría exhibida por más de una decena de grupos nacionales y de Finlandia, Canadá, República Dominicana y México.

Las profesoras Digna Guerra y María Felicia Pérez, con un sitio consagrado entre quienes promueven la interpretación vocal en país, junto a otras noveles directoras formadas a la usanza del maestro Electo Silva merecieron la ovación del público.

El festival llegó hasta los centros laborales y educacionales de la Ciudad Héroe, en una clara demostración de la buena salud del canto coral, cuya principal expresión de continuidad se refleja en el fuerte movimiento juvenil e infantil que promueven varias provincias cubanas.

Para cerrar sus actuaciones los cantores salieron a las calles y se fundieron junto al pueblo en las tradicionales rondas corales, una suerte de función colectiva que ratifica a Santiago de Cuba entre las principales plazas de esta manifestación artística a escala global.

 

| Portada  | Nacionales | Internacionales | Cultura | Deportes | Cuba en el mundo |
| Comentarios | Opinión Gráfica | Ciencia y Tecnología | Consulta Médica | Cartas| Especiales |

SubirSubir