La producción de viandas y hortalizas creció en la provincia cubana
de Ciego de Ávila en el actual año al recolectarse más de dos millones
y medio de quintales, a pesar del clima adverso, especialmente para la
cosecha de papa.
Los mejores resultados se registraron en plátano, tanto fruta como
vianda, lo cual permitió un buen abastecimiento a los mercados
agropecuarios locales y el envío de importantes cantidades a Ciudad de
La Habana y provincias orientales.
Las pariciones de las más de 400 caballerías de bananos existentes
en los sectores estatal y campesino tensaron a la Empresa de Acopio,
sobre todo por lo producido en el municipio de Baraguá, donde
convergen la entidad La Cuba y tres cooperativas, todas de referencia
nacional.
El sector cooperativo-campesino aportó 46 por ciento de los
alimentos agrícolas del territorio, cifra por encima de igual período
del año anterior.
Pero las temperaturas nocturnas por encima de las previstas
entorpecieron sobremanera la cosecha de papa al recogerse sólo 556 mil
quintales, de un millón 15 mil de plan, la mayor disminución aquí en
los últimos 15 años.
Aunque los agricultores del tubérculo redoblaron sus esfuerzos, los
rendimientos estuvieron muy por debajo, debido a que este cultivo
requiere de noches frías, con promedios de 15-17 grados Celsius,
mientras que realmente fueron cuatro grados por encima de la media
histórica, señalaron especialistas.