Tras la presentación de un plan
bipartidista de reforma migratoria, medios congresionales anticipan
hoy que su introducción en el pleno del Senado el próximo lunes
desencadenará un arduo debate.
Al respecto, los líderes de la mayoría demócrata en el Congreso,
Harry Reid y Nancy Pelosi, expresaron serias inquietudes sobre algunas
de las partes del plan apoyado por la Casa Blanca.
Reid considera que es un buen punto de partida para las
deliberaciones pero dijo estar preocupado por algunos de sus
enunciados y exhortó a mejorarlo durante el debate.
Indicó que introducirá algunas enmiendas con ese fin, lo que para
analistas es un anticipo de que las negociaciones aún pueden
extenderse en el tiempo.
Mientras, la vocera de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi
dijo que los miembros del Senado deben mejorar la propuesta antes de
ser enviada a la Cámara, donde la mayoría demócrata es mas amplia.
El acuerdo bipartidista fortalece las fronteras del país y ofrece a
millones de personas regularizar su situación en Estados Unidos,
aunque bajo condiciones que no son aceptadas por todos.
Los negociadores de ambos partidos entienden que con esta propuesta
se creará un programa de trabajo temporal y establecerá un nuevo
sistema basado en méritos para los futuros inmigrantes.
"El acuerdo que alcanzamos es la mejor oportunidad que tendremos
para asegurar nuestras fronteras, sacando a millones de personas de
las sombras y llevándolas a la luz de Estados Unidos", dijo el senador
Edward Kennedy en declaraciones citadas por la CNN.
Por su parte, para el republicano Jon Kyl, parte del sector
conservador que negoció el plan, desde su perspectiva no es perfecto,
pero representa la mejor oportunidad posible en una vía bipartidista
de hacer algo sobre éste problema