La petrolera estatal brasileña
Petrobras anunció hoy que reanudará su plan de inversiones en Bolivia,
congelado desde que el gobierno nacionalizó el sector de hidrocarburos
en mayo pasado.
Un comunicado de esa firma señala que el acuerdo se concretó
durante la visita del presidente Evo Morales a Brasilia la semana la
pasada y sus encuentros con el ministro de Minas y Energía de Brasil,
Silas Rondeau.
La reanudación de las inversiones en Bolivia fue uno de los
compromisos asumidos por el gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva, que
anunció su decisión de aceptar la demanda boliviana de elevar el
precio del gas natural vendido a la vecina nación, asegura el texto.
Tras casi un año de desacuerdos, Brasil aceptó elevar el precio que
paga por el gas natural boliviano de 1,09 dólares el millón de Unidad
Térmica Británica (BTU, por sus siglas en inglés) a 4,20, con el
consecuente beneficio para el país andino.
Por primera vez se consigue un aumento de esa dimensión, remarcó el
ministro boliviano de Hidrocarburos, Carlos Villegas, quien destacó
que representa ingresos adicionales por 68 millones de dólares al año.
Brasil consumió en 2006 unos 26 millones de metros cúbicos diarios
de gas natural de Bolivia, equivalentes a la mitad del consumo del
estado de Sao Paulo.
Uno de los programas de Petrobrás en Bolivia es instalar, en
asociación con algún grupo estatal o privado local, una planta de
biodiesel con capacidad para producir 50 millones de litros por año.
Ese proyecto costará entre 30 millones y 50 millones de dólares, y
podría ser instalado en la región oriental de Santa Cruz, ubicada en
la frontera de los dos países y donde existen grandes cultivos de
soja, una de las materias primas para fabricar biodiésel.
El gobierno boliviano ha ratificado su voluntad de incentivar la
industrialización del sector de hidrocarburos tras firmar en octubre
pasado de 44 contratos con 12 firmas extranjeras, entre ellas
Petrobras, la argentina ENARSA y la venezolana PDVSA.