Indocumentados mueren en territorio mexicano
Unos
200 indocumentados centroamericanos mueren cada año en territorio
mexicano, en su intento de pasar a Estados Unidos, y más de cien
quedan inválidos al caer de trenes o en persecuciones policiales,
reportaron diputados mexicanos. De acuerdo con un estudio divulgado
por los legisladores, la ley General de Población "trata a esas
personas como criminales o peor de lo que tratan a los emigrantes
mexicanos en Estados Unidos". La información es de la agencia Ansa.
Según el documento, la ley también autoriza una "total
discrecionalidad a los funcionarios del Instituto Nacional de
Migración para perseguir y encarcelar a los centroamericanos que
ingresan ilegalmente a territorio mexicano", precisa. La
investigación, realizada por el Grupo de Trabajo de Migración de los
diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), señala que
unos 25 000 centroamericanos ingresan ilegalmente cada mes por la
frontera sur de México.
El documento indica también que, según datos de organismos no
gubernamentales de América Central, la cifra de esas muertes anuales
podría ser mayor de 450, ya que "hay cientos de desaparecidos de
quienes se desconoce su paradero final".
Un informe gubernamental de El Salvador, por ejemplo, revela que
entre 1997 y 2005 unos 50 000 centroamericanos salieron de ese país
hacia Estados Unidos y "nunca llegaron a su destino", dijo en
entrevista Edmundo Ramírez, diputado del PRI.
"De esa cifra negra de indocumentados que se perdieron en el
camino, algunos de ellos se han quedado a vivir en México y otros
murieron y fueron enterrados en calidad de desconocidos", expresó
Ramírez.
El estudio fue elaborado por la Comisión de Población, Fronteras y
Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados (cámara baja) de México.
Secuestros impunes
Grupos criminales, vinculados con policías y autoridades,
secuestran periódicamente en un sitio del meridional estado mexicano
de Oaxaca a inmigrantes de América Central y piden rescates de entre 2
000 y 10 000 dólares por cada uno, denunció un sacerdote católico que
afirma ser testigo de tales delitos.
"Las mafias tienen la complicidad de la policía y del municipio
para secuestrar a los inmigrantes, que llegan hasta este punto
exhaustos, hambrientos, pero con la mira clara de seguir hasta Estados
Unidos", aseguró desde ciudad Ixtepec el sacerdote Alejandro Solalinde.
El gobierno de Felipe Calderón, que asumió en diciembre, prometió
que hará su máximo esfuerzo por garantizar los derechos de los
viajeros centroamericanos, pero las denuncias sobre abusos no se han
detenido.
Activistas y políticos opositores acusan a las autoridades de
aplicar el doble rasero, pues cuando se trata de los derechos de los
inmigrantes mexicanos en Estados Unidos reclaman con vehemencia, pero
hay poca acción cuando se trata de los centroamericanos en México.
Para llegar a Estados Unidos, los indocumentados de América Central
pagan más de 3 000 dólares a traficantes de personas, según diversos
informes. Pero esa cantidad no es suficiente, pues en su paso por
México son obligados a desembolsar mucho más y sufren asaltos o son
secuestrados como en Ixtepec.
Además, muchos resultan lisiados o mueren cuando intentan subir a
los trenes de carga, otros son atacados por pandillas juveniles o
resultan víctimas de violaciones sexuales.
El estatal Instituto Nacional de Migración señala que cada año las
detenciones y deportaciones de inmigrantes en la frontera sur superan
las 250 000. |