La lucha contra el mosquito Aedes aegypti
La ofensiva comienza en casa
Marianela
Martín González
mmartin@granma.cip.cu
Para el mosquito Aedes aegypti el verano es como abono para hierbas
indeseables. Las lluvias y el calor son el caldo de cultivo ideal en
la multiplicación de ese insecto señalado por Carlos J. Finlay como el
principal transmisor de la fiebre amarilla. Por tal razón hace mucho
tiempo que la campaña en su contra desarrollada en Cuba adquiere
dimensiones extraordinarias e involucra no solo a los trabajadores de
Salud Pública durante la referida etapa.
La
fumigación y otras labores para erradicar el vector cuenta con el
apoyo de los trabajadores de distintos sectores.
En el capitalino municipio de Plaza de la Revolución, Granma
comprobó que se trabaja por eliminar los focos de esta especie. A
pesar del esfuerzo no ha sido posible, porque faltan trabajadores
permanentes para el programa de erradicación en un área de salud de
11.82 kilómetros cuadrados, con más de 58 120 viviendas y una
cuantiosa población fluctuante que traslada en autos y medios
portátiles ese vector contaminante.
Especialistas de la campaña antivectorial consideran que necesitan
404 operarios permanentes para cubrir la demarcación y solo cuentan en
estos momentos con 157, por eso han reclamado la ayuda de los
trabajadores de otros sectores para ganar la batalla.
Expertos, como la licenciada en Microbiología Ellalín Cárdenas,
jefa de Departamento de Control Vectorial en Plaza de la Revolución,
coinciden en que la acción focal o autofocal realizada adecuadamente
puede paliar estas insuficiencias y ahorrar recursos materiales y
humanos en esta lucha con el fin de evitar brotes de dengue.
Es preciso impedir que en las viviendas existan criaderos de este
mosquito predominantemente doméstico, cuya hembra emplea la sangre
humana o de animales caseros como fuente de proteína para desarrollar
sus huevos.
La inspección focal siempre debe coincidir con el mismo día de la
semana, explica la bióloga, máster en Entomología médica Diana
González, quien durante 25 años se ha desempeñado en la actividad de
control vectorial y actualmente trabaja en el laboratorio donde se
diagnostican las muestras de los mosquitos provenientes de las
distintas áreas de salud de Plaza de la Revolución.
Es importante que el chequeo no exceda una semana, en
correspondencia con el ciclo evolutivo del insecto, pues en el octavo
día de puestos los huevos, salen los mosquitos adultos, indica la
especialista.
La inspección debe iniciarse por el fondo de la vivienda y centros
laborales, e incluir todos los depósitos que contengan agua,
recomienda la bióloga, quien resalta entre las ventajas del examen: la
disminución de vida del mosquito, autoprotección familiar, eliminación
del ente cuando todavía no transmite enfermedades, y evitar el uso de
insecticidas para combatirlo.
La campaña contra el mosquito Aedes aegypti está apoyada por las
organizaciones políticas y de masas en el territorio. Trabajadores de
distintos sectores se suman a las jornadas de saneamiento, que no
tienen tregua ni siquiera los fines de semana.
Martha Otero, vecina de El Vedado, mientras recibe en su casa a una
pareja de jóvenes trabajadores de la empresa del Ministerio de Turismo
TRANSTUR, reconoce la lucha contra el mosquito apoyada por jóvenes
como los que tiene frente a ella. Jamás me han encontrado un criadero
porque nosotros mismos vigilamos que no se forme, pero siempre es
bueno que inspeccionen.
Ellos alegan que no es la primera vez que cambian la recreación de
los sábados y domingos por labores como esa, para las cuales los
convocó la Unión de Jóvenes Comunistas de su centro. |