BEIJING.—
El senegalés Lamine Diak apostó de nuevo por un futuro saludable
para el atletismo, al realizar en su calidad de presidente la
tradicional conferencia de prensa que en víspera de sus grandes
eventos organiza la Asociación Internacional de Federaciones de
Atletismo (IAAF, siglas en inglés).
El sucesor del italiano Primo Nebiolo al frente de una de las más
poderosas federaciones deportivas internacionales, que ya agrupa a
212 miembros, fue recomendado recientemente para un nuevo período de
mandato durante el campeonato de África, valedero para seleccionar
al equipo que representará a ese continente en la Copa del Mundo de
septiembre próximo, en Atenas, Grecia.
Ataviado con su tradicional vestimenta senegalesa, Diak dijo en
la sala de conferencias del lujoso hotel Kun Lun, donde se aloja la
familia de la IAAF, que sentía un gran placer por encontrarse en
China con motivo del XI Campeonato Mundial Juvenil, más porque la
competencia cumplía 20 años de vigencia en este 2006, pues su
primera versión fue celebrada en Atenas, en 1986.
Creo que es esta una magnífica oportunidad para considerar la
importancia de esta competencia, no solo en lo referente al
desarrollo de nuestra Asociación, sino particularmente para el
futuro por el que trabajamos todos con gran entusiasmo con los
objetivos cifrados en el Plan Mundial de Atletismo y de cara al
centenario de la IAAF, en el 2012, señaló el presidente.
Refiriéndose a estos mundiales para menores de 19 años puntualizó
que desde su primera edición han constituido un barómetro para la
salud del atletismo, pues ha permitido que los atletas jóvenes
cuenten con un escenario de fogueo al más alto nivel antes de
enfrentar las tensiones lógicas de los campeonatos de mayores o los
Juegos Olímpicos.
También ejemplificó con cifras el progreso que para el atletismo
de diferentes naciones en desarrollo han reportado estas citas: en
1986 hubo atletas medallistas de 27 naciones y finalistas de 48,
mientras que en el 2004 (Grossetto, Italia) llegaron a 39 y 68,
respectivamente.
Luego de saludar con satisfacción los récords logrados aquí, de
1 451 atletas (806 masculinos y 645 femeninos) y de 180 países
participantes, se refirió a la importancia del escenario, pues
dentro de dos años la misma gigantesca capital china sería la sede
de los Juegos Olímpicos y comentó además que el tiempo era
suficiente para que algún campeón mundial juvenil de ahora pudiese
retornar a competir en la lid de los cinco aros.
En tanto pueda surgir una nueva generación dorada para los Juegos
del 2008, Diak precisó que hasta el momento había sido el campeonato
mundial juvenil de 1992 el que más campeones mundiales y olímpicos
había aportado con posterioridad, con nada menos que 51 incluyendo
los integrantes de los relevos.
Mencionó por su nombre a glorias del atletismo mundial que se
dieron a conocer primero en estas citas, como la pertiguista rusa
Yelena Isinbayeva, la heptatlonista sueca Carolina Kluft y nuestra
recordista mundial de la jabalina Osleydis Menéndez, entre las
damas, así como el fenomenal fondista etiope Haile Hebresselasie, el
marroquí Hicham El Guerrouj o el velocista trinitario Ato Boldon,
entre los varones
Se podrían agregar otros nombres, como él lo hizo, y
particularmente este periodista no dejaría de mencionar al
sensacional saltador de altura Javier Sotomayor como producto neto
del trabajo al más alto nivel desde las edades tempranas.
Antes de finalizar, Lamine Diack señaló que conocía el disgusto
de toda la familia del atletismo por las recientes noticias que
envuelven en un caso de dopaje al estadounidense Justin Gatlin,
campeón olímpico y mundial de los 100 metros planos.
Precisó que, independientemente de no estar concluido el caso,
aprovechaba esta importante oportunidad para precisar que la IAAF
estaba totalmente alineada en la lucha contra el dopaje y que para
defender la credibilidad del atletismo la entidad haría todos los
esfuerzos posibles en coordinación con las federaciones nacionales y
las fuerzas antidopaje, en aras de defender la pulcritud de la
mayoría de los atletas frente a la pequeña minoría que insiste en
ignorar las reglas.
Se complació en anunciar que, en asociación con la Agencia
Mundial Antidopaje (AMA), la IAAF había montado en esta sede un
stand antidopaje encaminado a incrementar los conocimientos en los
jóvenes atletas, con el concurso de leyendas del deporte como la
francesa triple campeona olímpica Marie-Jose Perec, el triplista
estadounidense Mike Conley y la vallista jamaicana Deon Hemmings,
residente en Estados Unidos.
Se pretende con el programa educacional incidir en la cultura de
la elite del deporte, incluyendo discusiones abiertas en las que se
aborden tanto los peligros del dopaje como la trascendencia de la
ética deportiva y del juego justo.
Queremos que aprendan que se puede estar limpio y ganar, concluyó
el presidente de la IAAF