BAGDAD, 9 de agosto (PL).—
Al menos 15 personas murieron hoy en esta capital por distintas
acciones de la insurgencia, entre ellas en una céntrica plaza
mientras que se registraron otros ataques en los que perdieron la
vida nueve policías, se informó oficialmente.
Entre las más sonadas de esas
operaciones de la resistencia figura un atentado suicida contra un
vehículo militar norteamericano que se incendió, así como otros
10 coches más.
No hay reporte de si hubo bajas entre
la tripulación del carro de combate estadounidense.
El ataque que tuvo como escenario la
céntrica Plaza Tayaran y mató a tres civiles tenía como objetivo
una patrulla norteamericana que se desplazaba por el lugar.
En ese ambiente de violencia, otros
tres civiles perdieron la vida y siete resultaron heridos cuando
hombres no identificados dispararon contra un autobús en la
localidad de Baquba, a 130 kilómetros al noroeste de Bagdad.
Por otra parte, otras informaciones
dan parte de la muerte de nueve policías y otros 10 heridos a causa
en cinco ataques contra igual número de patrullas en diversos
barrios de la capital iraquí, afectada desde la víspera por una
fuerte tormenta de arena.
Sin embargo, los líderes de
distintas comunidades iraquíes reiniciaron este martes una reunión
en busca de consenso que permita presentar el venidero día 15 el
borrador de la nueva Constitución.
La reunión estará encabezada por el
presidente interino del país, el turco Yalal Talabani y el primer
ministro de la rama chiíta del Islam, Ibrahim al-Yafari.
Los desacuerdos son aún profundos en
cuestiones como la división del Estado, el reparto de los
yacimientos de petróleo y el papel del Islam en el nuevo gobierno.
Este encuentro se prolongará hasta
el sábado, cuando se de inició a una ronda de negociaciones que
según Talabani se mantendrá sesionando hasta que haya un acuerdo.
Pero desde ya, el líder kurdo Masud
Barzani, adelantó que su comunidad no cederá en asuntos como el
federalismo y el estatus de la ciudad petrolera de Kirkuk, en el
norte, cuyo control exige.
En ese contexto afloró que los
kurdos se oponen a que la religión del Estado y la fuente principal
de la ley sea el Islam, como desea la mayoría chiíta.
Los sunitas, otra rama de la
religión musulmana, rechazan que exista una región federal chiíta
que englobe el sur del país.
Están presentes otros desacuerdos
como los derechos de las mujeres, la lengua, la bandera y el nombre
del país que vaticinan que las discusiones serán escabrosas.
En este contexto, informaciones
procedentes de Estados Unidos indicaron la posibilidad de que el
gobierno de ese país aumente el número de sus tropas en Iraq para
neutralizar la creciente violencia en víspera del proceso político
de octubre a diciembre, cuando tendrá lugar un referendo
constitucional y elecciones, respectivamente.
Tal anuncio fue hecho a despecho del
formulado recientemente de un eventual retiro de efectivos
estadounidenses.
Estados Unidos tiene acantonados en
Iraq unos cien mil 400 militares y han muerto desde la invasión a
este país árabe en marzo de 2003, mil 837, de acuerdo con cifras
del Pentágono.