Las autoridades políticas y
gubernamentales de la provincia de Las Tunas aceleran las medidas
para amortiguar la implacable sequía que azota a la población, los
cultivos y las industrias.
En ese sentido se acomete una
tubería de ocho kilómetros desde la presa Juan Sáez para encauzar
el imprescindible líquido al central Antonio Guiteras y a los
pobladores que circundan al mayor productor de azúcar de Cuba.
Pedro Jiménez Espinosa, primer
secretario del Partido en la provincia, significó a la prensa la
importancia de conocer cuanto antes la cantidad de pozos, sus
condiciones y la calidad de las aguas para elaborar un programa de
explotación y de construcción de otros en los lugares más
factibles.
Estas medidas se unen a otras en
marcha como el uso de centenares de medios de transporte para el
traslado de agua a barrios y comunidades y a la ganadería, explicó
el también miembro del Comité Central.
Los embalses de Las Tunas se
encuentran al 20 por ciento de su capacidad como promedio, pero la
mitad de esa cifra se almacena en la presa Juan Sáez, municipio de
Jesús Menéndez, con muy pocas posibilidades de explotación por no
disponer de instalaciones hidráulicas de regadío.
Todo lo contrario sucede en las
presas El Rincón y Cayojo, principales fuentes de agua de la
capital provincial, que sólo disponen de 1,5 y 1,2 millones,
respectivamente, mientras la cuenca La Cana está cerca de la
explotación permitida.
Una conductora de 21 kilómetros
desde Jucarito, provincia de Granma, hasta la presa El Rincón,
solucionará el abasto de agua a la población tunera, y solo se
espera el completamiento de los recursos para acometerla.
(AIN)