GINEBRA, 21 de octubre (PL).—
Un nuevo drama afecta hoy a muchos niños del mundo, y es la
pérdida de sus padres a causa del SIDA, enfermedad por la cual 14
millones de infantes quedaron huérfanos en el último año, según
datos de UNICEF.
Representantes del Fondo de Naciones
Unidas para la Infancia (UNICEF) dijeron que 11 millones de esos
pequeños viven en África Subsahariana y se calcula que más de un
millón habita en la India.
Sin embargo, esto no es todo, aseguró
Peter Piot, director de ONUSIDA, el número de huérfanos como
consecuencia de la mortal patología podría alcanzar al menos 26
millones en los próximos 10 años.
Es necesario aplicar estrategias para
mantener con vida a sus padres, y protegerlos del desamparo, la
violencia y la explotación a que se pueden ver expuestos, añadió,
así como garantizarles acceso a la salud y la educación.
En ese sentido, UNICEF anunció que
conjuntamente con ONUSIDA ampliarán sus capacidades de acción,
aunque estimados preliminares consideran necesarios al menos mil
millones de dólares en los países afectados, para mejorar la vida
de los niños huérfanos.
Carol Bellamy, directora ejecutiva de
la institución, afirmó que las dos terceras partes de las naciones
más golpeadas no cuentan con estrategias ni políticas públicas
que favorezcan el desarrollo de los menores de 15 años.
Tampoco tienen normas en materia de
protección y cuidados, agregó la experta.
Por otra parte, existe el problema de
los pequeños que adquirieron el SIDA, contagiados por vía materna,
número que se ha incrementado notablemente.
A pesar de que unos 4 700
millones de dólares fueron prometidos por los países
desarrollados, empresas privadas y fundaciones, hasta la fecha sólo
1 500 se hicieron efectivos y han sido utilizados en la compra de
medicamentos y materiales, construcción de infraestructura y
formación de expertos.
Según datos oficiales, 42 millones
de personas en el mundo padecen actualmente de VIH/SIDA, de los
cuales 38,6 millones son adultos y 3,2 millones niños menores de 15
años.