Graduados 1 055 Técnicos Básicos de la Salud
Nuevas realidades que
superan sueños
José
A. de la Osa
La
graduación anoche, con la presencia del Comandante en Jefe Fidel
Castro, de 1 055 Técnicos Básicos de la Salud de Ciudad de La
Habana, abre a los egresados la oportunidad de convertirse en
Técnicos de Nivel Medio primero, y después en Licenciados en
Tecnología de la Salud, y se inscribe como parte de las
transformaciones en esta importantísima esfera del desarrollo
social de nuestra Patria.
En su intervención en
el acto, celebrado en el teatro Astral de esta capital, Fidel
destacó que después de los enormes avances logrados por nuestro
pueblo en el campo de la salud, el 18 de septiembre del 2002, en
reunión con médicos, enfermeras y dirigentes del sistema de salud,
se abordaron puntos de gran importancia relacionados con este tema y
determinados proyectos para transformar radicalmente los servicios
de nuestro sistema sanitario.
Ello exigía, como es
lógico, nuevos y revolucionarios conceptos, comenzando por los
servicios de atención primaria. Y se hizo evidente, planteó, la
necesidad de formar con urgencia miles de técnicos para los nuevos
servicios que debían prestarse en todos los policlínicos del
país.
Una preocupación
permanente era la de acercar los servicios a la población y
ahorrarles millones de viajes y molestias a los pacientes, del mismo
modo que se estaba haciendo con la educación.
Por ello se inició la
formación, con carácter emergente, comenzando por la capital del
país, del primer contingente de jóvenes en los perfiles de Terapia
Física y Rehabilitación, Laboratorio Clínico, Rayos X y Medicina
Transfusional (bancos de sangre).
Explicó que esta tarea
se proyectó bajo los principios de la universalización de la
enseñanza superior, con sede en los diferentes municipios de la
capital, y una que radica en el Instituto Superior de Salud Salvador
Allende, ubicado en el municipio del Cerro.
La estrategia trazada se
orientó hacia dos direcciones fundamentales: lograr la preparación
integral de los estudiantes con sólidos conocimientos técnicos en
los perfiles mencionados, y a la formación de valores humanos,
convicciones profundas y el compromiso con el pueblo y la
Revolución.
Fidel dijo que este
curso demostró que con el esfuerzo conjunto, la consagración y el
noble deseo de ser útiles se pueden lograr resultados no alcanzados
anteriormente. Estamos convencidos, agregó, de que hoy graduamos
jóvenes que son humanamente mucho mejores que diez meses atrás y
que constituirán una fuerza adecuada para emprender la tarea que el
sistema nacional de salud requiere de ellos.
Del total de 1 072
estudiantes de la matrícula final, culminaron los estudios 1 055,
lo que representa el 98,4% de la promoción. En cuanto a la calidad,
784 estudiantes (un 74,3%) finalizaron el curso con calificaciones
entre Excelente y Muy Bien.
En un somero análisis
del impacto que tendrá esta graduación en los servicios de salud
que se brindan a la población, Fidel señaló que en Terapia
Física y Rehabilitación, antes de iniciar este programa de
formación emergente de Técnicos Básicos de la Salud, existía
este servicio con equipos adecuados en solo un policlínico de la
capital (15 y 18, municipio de Plaza), y en un hospital, el Julio
Díaz, bien distante del centro de la ciudad.
Actualmente, acotó,
existe el Servicio de Terapia Física y Rehabilitación en 13
policlínicos.
El número de técnicos
en Terapia Física y Rehabilitación trabajando en toda Ciudad de La
Habana para estos servicios, antes de esta graduación, era de 236,
y con esta se incorporan 511 más, para un total de 747.
Fidel comentó que antes
de finalizar el año se espera brindar estos servicios a la
población en la totalidad de los policlínicos de la capital,
aunque es necesario, precisó, continuar la formación de técnicos
para lograr una progresiva estabilidad y eficiencia de esta fuerza.
Pasó revista también a
los incrementos de técnicos que se producirán en Rayos X, a lo que
debe sumarse la instalación de 48 equipos nuevos, para de esta
forma garantizar que los 82 policlínicos de la capital cuenten con
servicios y tecnología adecuados.
Destacó que en un
período de 4 años más, estos nuevos graduados pueden alcanzar el
título de Licenciados en Tecnología de la Salud, desde los
servicios en que se encuentren laborando, una vez concluido ya el
primer año de formación intensiva. Y luego, como licenciados
tendrán la posibilidad de acceder a las diferentes formas de
posgrado, desde cursos, diplomados, maestrías, hasta el doctorado.
Este modelo pedagógico
para la formación de Licenciados en Tecnología de la Salud,
iniciado en Ciudad de La Habana en cuatro perfiles, a partir de este
curso 2003-2004 se extiende al resto del país con la posibilidad de
prepararlos en 20 perfiles diferentes. Entre ellos Terapia Física y
Rehabilitación, Laboratorio Clínico, Imagenología, Optometría y
Óptica, Prótesis Estomatológica, Registro, Información e
Informática en Salud, Higiene y Epidemiología, Logopedia,
Foniatría y Audiología, Farmacia Dispensarial, Rehabilitación
Social y Ocupacional, Nutrición y Dietética.
Nos sentimos alentados
con estos planes que parecen sueños, reflexionó, y los estamos
viendo convertidos en realidades que superan lo que pudiéramos
haber imaginado que sería el fruto de esos esfuerzos.
Subrayó que en salud y
educación, esos dos grandes pilares, Cuba se está yendo y se irá
ampliamente por encima de todos los países del mundo desarrollado y
no desarrollado. Ese es el fruto de haber luchado y defendido la
obra de la Revolución durante tantos años, y la disposición de
defenderla hasta la última gota de sangre para que nuestra juventud
tenga lo que tiene hoy.
En el acto usaron de la
palabra también los doctores Damodar Peña, ministro de Salud
Pública, y Julio Portal, director de la Escuela Emergente de
Técnicos de la Salud Salvador Allende, y Orestes Hernández Sosa,
en nombre de los graduados |