Festival Benny Moré

El sonido se inclina por el bailable

Omar Vázquez

CIENFUEG0S.— El sonido de este XIV Festival Internacional de Música Popular Benny Moré se inclinó por el bailable. Esa ha sido su tónica y, en general, si excluimos ciertos excesos en cuanto al socorrido recurso de algunos cantantes de pedir apoyo del público ("todos con las manos arriba..."; "¿dónde están las mujeres?") y otras muletillas de escenario, el desarrollo de esta edición ha servido para mostrar que nuestra música mantiene buena salud.

No obstante, la actuación de una docena de excelentes músicos, mayormente latinos, mostró la capacidad de someter su individualidad al objetivo que debe definir a un proyecto como este. Así, nada tiene de extraño que en la fiesta del sábado en la noche, por ejemplo, fuera tan difícil precisar a cuántos miles ascendía la multitud reunida en la Plaza de Cienfuegos.

El grupo La timba loca (Estados Unidos), dirigido por el arreglista y pianista venezolano Gonzalo Grau, muestra una atinada concepción artística, como demostró en números de su primer CD, Más allá de La Habana. Ellos trabajan actualmente en la preparación y recreación de clásicos de la música latina con arreglos armónicamente avanzados y una forma de timbear que fue recibida con agrado.

Después de cuatro años sin tocar en la Perla del Sur, Elito Revé protagonizó el programa con recientes creaciones que siguen pegando. El mantenido éxito del Charangón parece haber radicado en mantener su timbre y su cubanía.

Un pianista de consciente desempeño como es César (Pupy) Pedroso, secundado por jóvenes buenos músicos y sirviéndose de su resaltante obra autoral, no hizo necesario proclamar que los que Los que Son Son están inmersos en el favor popular.

Sonero por naturaleza, por otro lado, Cándido Fabré con su Banda se sirve también de la guaracha para aprehender las expresiones del pueblo, apoyado en su facilidad como improvisador, y hacer bailar a grandes multitudes con números como los del CD La Habana quiere guarachar conmigo, en el que sobresale Fabré llegó. Ello lo mantiene en el tope de la popularidad.

Momentos logrados como estos se sucedieron, tanto en Cienfuegos como en Lajas. Lo que el Benny hacía es eterno, y por ello vivirá entre nosotros y entre las generaciones que nos sucederán, aspecto subrayado, en la parte teórica del encuentro, por el joven cantante y compositor Equis Alfonso, al relatar su experiencia en la realización del CD Equis Moré. Homenaje a Benny Moré, que le valió el Premio Cubadisco 2003 y una nominación al Grammy.

Aciertos del Festival aparte, que hubo otros muchos, la provincia de Cienfuegos debe trabajar aún más en el diseño del evento y otros aspectos relacionados con esta figura, no solo respecto a reclamos de sus coterráneos, como es el que el Benny cuente con una estatua digna de su figura, o que el Museo que lleva su nombre sea enriquecido; sino, además, en cuanto a otros hechos, como lo es actualizar e incorporar a otros artistas que jugaron un papel importante en su vida.

Este Festival tendrá su continuidad en Ciudad de La Habana durante la VIII edición de la Feria Internacional Cubadisco —23 al 30 de mayo del próximo año 2004— que llevará el lema El Caribe vibra y canta en la Isla del Son y también tendrá como figura central al Bárbaro del Ritmo, en ocasión del aniversario 85 de su natalicio.

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