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Hernández, con salsa y rock, logra marca mundial en dominio del balón Erick Hernández, el ex futbolista cubano, batió su propia primacía universal en la posición de sentado, con 2 horas, 33 minutos y 7 segundos y 22 191 toques al esférico Eduardo Yero La contagiosa música de reconocidos salseros latinoamericanos y el fogoso "Rock and roll" interpretado por su "rey", Elvis Presley, se "confabularon" para que el cubano Eric Hernández impusiera este sábado una nueva cota mundial de dominio del balón en la posición de sentado. Hernández, un ex integrante de la selección nacional de fútbol, de 37 años, mantuvo el balón sin tocar el suelo durante 2 horas, 33 minutos y 7 segundos, para sumar la cifra de 22 191 toques al esférico y anotarse la nueva plusmarca universal en esta modalidad. La anterior primacía en la posición de sentado estaba en su poder desde el 16 de noviembre del año pasado, cuando consiguió durante 2 horas y 32 minutos golpear la pelota en 21 241 ocasiones. Juan Antonio Lotina, árbitro principal del evento, dijo a EFE que su país hará todas las gestiones pertinentes con la documentación requerida para intentar que esta plusmarca sea reconocida por el Libro Guinness de los récords, al igual que otras dos de sus cotas que esperan la respuesta. "La implantación de un récord en esta disciplina es siempre difícil, sobre todo en esta prueba sentado que es una posición muy incómoda", dijo Hernández a la prensa tras finalizar su gesta. Añadió que a diferencia de otras plusmarcas universales, en esta le estimuló mucho la presencia de amigos y conocidos que invitó para la ocasión. Los toques iniciales del balón estuvieron respaldados por la música del salsero puertorriqueño Andy Montañez y su pieza "Vivir sin ella", que puso a mover los pies y a contonear las cadenas de algunas de las numerosos chicas presentes. Posteriormente el también "salsero" boricua Marc Anthony y el venezolano Oscar D'León, la agrupación cubana "Charanga Habanera" nominada esta año para un Premio Grammy Latino, y la baladista italiana Laura Pausini, y el fallecido sonero Polo Montañez, pusieron su toque musical. El Rock and Roll, un género que busca ganar un espacio más amplio en esta isla, matizó igualmente la jornada, en voz de su "rey", Elvis Presley con la mítica "Dont'be cruel", entre otras. "La música para mi es fundamental, pues me ayuda a romper el tedio y a hacer que el tiempo pase mucho más rápido", dijo el espigado atleta negro a EFE. "Ha sido una música variada que al final la pedí según mi propio gusto", sentenció Erick Hernández a la prensa, bañado en sudor tras conseguir su meta. Señaló que unas 200 personas que se congregaron en el Club Habana de la capital para presenciar su actuación, no le molestaban. "Por el contrario me ayuda bastante y no me desconcentra". "Físicamente he terminado bastante agotado, pues estaba muy comprometido con esta nueva meta, y tenía que hacerlo, eso me creó una fuerte tensión, pero al fin pude materializar este récord mundial", dijo con satisfacción el ex futbolista. Explicó que más que la preparación física "el poder de concentración es lo fundamental que tengo para poder conseguir estas plusmarcas universales". Añadió que la concentración la consigue mediante los entrenamientos diarios y que le ayuda mucho. "Desde hacía meses ya me imaginaba en este escenario donde iba a realizar el récord. "De momento voy a tomar unas vacaciones y después pensaré en alguna otra meta", concluyó Hernández, que cargaba en los brazos a su hijo Erick Ronaldo, de dos años y medio. El masajista del atleta, Edgardo Cobián, le aplicó en varias partes de su cuerpo cada media hora una sustancia a base de mentol, salicilato, aceite mineral y alcanfor "para evitar alguna dolencia muscular", según explicó a EFE. Luego de que el atleta consiguiera su nueva cota mundial, el médico Francisco Montesinos le midió su presión sanguínea, que fue de 150/90, mientras que su frecuencia cardiaca era de 90 pulsaciones por minuto, que consideró "normales tras haber hecho este tipo de esfuerzo". El capitalino Erick Hernández cuenta en su haber con numerosas plusmarcas mundiales de dominio de balón, y la más reciente fue la conquistada el 26 de abril de este año, al estar 10 horas y 30 segundos sin dejar caer la pelota al suelo con los pies y cabeza, para lo cual necesitó darle 57 330 toques. |
