SAN SALVADOR, 23 de julio (EFE).— Un niño de once años murió por la explosión de una granada lanzada por una de las numerosas bandas de adolescentes que hay en El Salvador, a las que la policía atribuyó hoy la muerte de otras seis personas esta semana.

Un portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC) dijo a EFE que Edwin Alexander Rivas, de once años, murió anoche en la colonia Las Margaritas, en Soyapango, en las afueras de la capital, cuando integrantes de una pandilla lanzaron una granada que también causó heridas a Anabel Delgado, de 19 años.

Las víctimas se encontraban en una calle en las proximidades de sus viviendas junto con otras personas cuando los delincuentes lanzaron en forma inesperada la granada.

Por ese hecho la policía detuvo a dos menores de edad, miembros de la "Mara 18" (pandilla), a quienes identificó sólo como "El Duende" y "El Duque", de 13 y 15 años, respectivamente.

La fuente dijo que pocas horas antes de ese suceso, en Soyapango ocurrió el asesinato de los hermanos Víctor Eduardo y Ernesto Edgardo Sánchez Ruiz, de 24 y 25 años, respectivamente, quienes pertenecían a la "Mara 18".

El hecho ocurrió en la colonia 22 de Abril, de Soyapango, donde la policía detuvo a un joven no identificado, de 16 años, supuestamente miembro de otra pandilla, bajo acusación de "doble asesinato".

Otra fuente policial informó de que tres hombres fueron asesinados anoche en el cantón El Llano de la Laguna, en el departamento occidental de Ahuachapán, también a manos de supuestos miembros de una pandilla.

Las víctimas, Armando Merlos y los hermanos Rufino de Jesús y Elías Ruiz Guardado, cuyas edades oscilan entre 33 y 36 años, habían salido hace dos meses de una cárcel donde cumplieron una condena por tráfico de droga, según los informes.

La policía también informó que José Ernesto Alfaro, de 15 años, fue asesinado el lunes pasado por pandilleros de la "Mara 18" en Soyapango.