Muy reñida la lid
masculina
El mejor equipo del
mundo en judo (f) está en la Olimpiada
Manolo Poulot se
estrena como entrenador y Driulis hará su regreso oficial
Oscar
Sánchez
Santiago
de Cuba no solo tendrá en el judo a una de las competencias de más
alto nivel en la I Olimpiada Nacional, sino que, además, tendrá el
incentivo de ser testigo de un importante regreso, y al propio
tiempo se hará el honor de estrenar a su judoca más laureado en
función de entrenador.
Driulis González,
bronce olímpico de Barcelona'92, titular del mismo rango en
Atlanta'96, oro mundial de 1995 y 1999 y plata de ese mismo abolengo
en 1997, le dará a Santiago de Cuba la oportunidad de verla en su
retorno a los tatamis, otra vez dirigida por Ronaldo Veitía, el
hombre que la catapultó hasta la condición de mejor judoca del
mundo. Mientras, Manolo Poulot, un típico santiaguero, monarca del
planeta en 1999 y bronce en los Juegos estivales de Sydney'00, se
iniciará en esta fiesta de pueblo, y en su pueblo, como entrenador,
justamente del equipo Orientales, en unión de Justo Noda, el
profesor que lo llevó hasta la cúspide.
Pero el alto vuelo a la
justa no solo lo darán ellos, pues en la lid femenina, pese a
contar con un promedio de edad de solo 21,4 años, el grupo de 21
muchachas que estarán en la sala Antonio Maceo, ha logrado más de
40 medallas, de ellas más de 20 de oro en certámenes universales,
entiéndase Juegos Olímpicos, mundiales (juveniles y de mayores) y
Copas del Mundo, en tanto los varones con 20,4 de promedio, aunque
más discretos con la presea dorada del tunero Yordanis Arencibia en
la lid del orbe para bisoños y sus dos bronces en las dos últimas
ediciones mundialistas absolutas, conforman un grupo de grandes
perspectivas.
¿Cuál de las tres
delegaciones será la triunfadora? La respuesta es muy fácil en el
concurso de damas, pero en el de caballeros, es sumamente engorroso
responder.
El equipo oriental de
mujeres, no lo dude nadie, es hoy el mejor del mundo. Al menos como
escuadra es la de más aval en los últimos diez años en el
planeta. Claro, nada sustituye a la competencia y esa distinguida
condición tendrán que exponerla ante adversarias que mostrarán
sus aspiraciones. Y Centrales en el papel parece más que
Occidentales.
Serán los 48
kilogramos, 63 y más de 78 las divisiones donde la atracción debe
subir más alto. En la primera, la indómita Suislay Jay tendrá su
mayor oposición en la occidental Misleydis Crespo; en 63, el solo
regreso de Driulis levanta las expectativas, y además, encontrará
a una Anaisis Hernández, bronce en el último Mundial y plata en la
Copa del Mundo, defendiendo a Centrales. Y en más de 78 un clásico
entre la pinareña Ibis Dueñas y la doble campeona mundial de
mayores Daima Beltrán.
Del lado varonil, la
disputa será bien cerrada. Centrales tiene cuatro divisiones en las
que puede pelear, dos de ellas 81 y 90 muy seguras con las custodias
de Gabriel Arteaga y Yosvani Despaigne, ambos entre los 10 mejores
del ranking mundial. Las otras dos son 100 y más de 100.
Occidentales tiene fuerza en 73, 100 y más de 100, donde se mezclan
juventud y experiencia, y Orientales con Leonides Mena (60) y
Yordanis Arencibia (66) parece invencible en esos dos pesos, en
tanto en más de 100, Rigoberto Trujillo hallará una fuerte lid,
pese a su condición de favorito. En los 100, también tiene muy
buenas opciones, pero es una de las categorías más parejas. Lo
mismo le ocurre en los 73. ¿Pronóstico? Orientales, pero si yo
fuera de ese equipo, lo calificaría de vaticinio reservado. |