5 853 estudiantes en sus aulas

Inaugurado ayer el cuarto curso premédico de la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas

José A. de la Osa

El cuarto curso premédico de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), con una matrícula de 1 100 estudiantes procedentes de 20 países de América Latina, el Caribe y Estados Unidos, se inauguró ayer en las áreas del Instituto Superior de Ciencias Básicas y Preclínicas Victoria de Girón, en esta capital.

Es un verdadero sueño americano hacer hombres de bien a los hijos de nuestras tierras para un futuro más promisorio, dijo el doctor Jorge González, rector del Instituto, al darles la bienvenida a los alumnos reunidos en ese alto centro de estudios.

Luego de una estancia de 18 semanas en Victoria de Girón (tiempo que dura el premédico) los más de mil estudiantes pasarán a la ELAM para realizar el primero y segundo años de la carrera en lo que se denomina Ciencias Básicas.

Incluidos los que ahora ingresan, el Proyecto de la Escuela Latinoamericana de Medicina reúne en la actualidad a 5 853 estudiantes de 24 países (19 de Latinoamérica y el Caribe, 4 de África y un grupo de Norteamérica), 3 313 de los cuales estudian los dos primeros años de Medicina y otros 1 440 cursan el tercer año en facultades de siete provincias del país.

El vicerrector primero de la ELAM, doctor Ángel Luis Selva, explicó que este proyecto está concebido para 6 años y medio, que es lo que dura la formación de Doctor en Medicina.

El Proyecto de la Escuela Latinoamericana, que abarcará a 
10 000 estudiantes, fue dado a conocer al mundo por nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro el 21 de noviembre de 1998, y apenas un año después dio comienzo el primer curso.

En el año 2005 egresarán los primeros médicos formados por la ELAM, que tienen el compromiso moral de ejercer la profesión en sus comunidades de origen, y que alcanzan también más de 60 etnias.

En la Escuela Latinoamericana, ha dicho Fidel, lo que nosotros queremos es que los estudiantes de los hermanos países latinoamericanos se impregnen de la misma doctrina en que se educan nuestros médicos, de esa entrega total a su noble profesión futura, porque el médico es como un pastor, un sacerdote, un misionero, un cruzado de la Salud y del bienestar físico y mental de las personas.

De los que iniciaron ayer el pregrado, los países con una mayor representación son Venezuela y Paraguay, con cien estudiantes cada uno.

En el acto inaugural, que contó con la presencia de los doctores José M. Miyar Barrueco, secretario del Consejo de Estado y Carlos Dotres, ministro de Salud Pública, usó de la palabra también la profesora Mercedes Gámez, directora general del Instituto Victoria de Girón.