El sueño de asistir a la Copa del Mundo Catar 2022 luce bastante difícil para la selección nacional de Cuba, al no contar con un potente equipo que le permita, al menos, avanzar a la segunda ronda eliminatoria de la Concacaf.
Lamentablemente esa es la realidad que vive hoy la escuadra de la Mayor de las Antillas, sustentada en una serie de argumentos que certifican el profundo retroceso que ha experimentado el fútbol cubano en los últimos años.
Hablamos del deporte que más se practica a nivel mundial y en la zona de Norte Centroamérica y el Caribe es una auténtica pasión en la inmensa mayoría de las naciones que abarcan esta región. Bajo este contexto Cuba no logra dar un despegue significativo, ni en las categorías juveniles, ni en la selección de mayores.
El sorteo mundialista de Concacaf dictaminó que nuestra escuadra inicie el proceso clasificatorio ante Guatemala y posteriormente rivalice con Curazao, Islas Vírgenes Británicas y San Vicente y las Granadinas. A pesar que no es el «Grupo de la muerte», los elencos de Guatemala y Curazao son cualitativamente superiores al cubano y hacen que el pasaje hacia Catar sea una quimera para el once que dirige Pablo Sánchez. Recordar que solo una nación avanza por cada uno de los seis grupos a la segunda ronda.
El conjunto tiene que afrontar este proceso mundialista con tranquilidad y sin presión. Lo importante es que en cada una de las cuatro salidas Cuba desarrolle un accionar positivo sobre la cancha. A Islas Vírgenes Británicas y San Vicente y las Granadinas se les puede derrotar, siempre y cuando se logre conformar un grupo donde exista el hambre por el triunfo y se consigan pactar al menos cuatro partidos amistosos, con la finalidad de perfeccionar los esquemas de las sesiones de entrenamiento.
Todavía se comenta entre aficionados y prensa especializada sobre la posible convocatoria al equipo Cuba de un grupo de futbolistas que militan en clubes extranjeros de manera independiente a lo establecido por la Asociación de Fútbol de Cuba. Hasta el presente todo indica que esa posibilidad no se concretará, pues los federativos cubanos no muestran intenciones por sumarlos al plantel, a pesar que desde agosto de 2019 se manejó la posible inclusión de esos hombres.
Aunque se convocara a esos jugadores se necesitaría de tiempo para ver cómo acoplan en el sistema de Pablo Sánchez, cuando Guatemala y Curazao son conjuntos con mejores armas y sus futbolistas más horas juntos sobre la cancha. No se puede pensar que con su sola presencia ellos resolverán las carencias del equipo Cuba.
No contar con una columna vertebral bien definida, sumado a un plantel donde la mayoría de sus integrantes carece de experiencia internacional son otros factores que atentan contra el buen desenvolvimiento del once nacional. Además, desde hace seis meses los futbolistas cubanos no juegan en el campeonato nacional y no se ha establecido una fecha exacta para convocar a la preselección nacional.
COMENTAR
Abel dijo:
1
2 de septiembre de 2020
10:43:23
Abel dijo:
2
2 de septiembre de 2020
12:06:10
Frank dijo:
3
2 de septiembre de 2020
13:29:41
Adanys Andres Respondió:
14 de octubre de 2020
22:49:32
Responder comentario